jueves 21  de  marzo 2024
HISTÓRICO

Una nueva tumba para Sor Juana Inés en México a 320 años de su muerte

Para conmemorar el aniversario, la casa de estudios, que resguarda su memoria, prepara una serie de actividades para el 16 y 17 de abril que culminarán con una ceremonia fúnebre y el depósito de los restos

CIUDAD DE MÉXICO.- dpa 

Los restos que se atribuyen a la monja escritora Sor Juana Inés de la Cruz (1651-1695), una de las grandes plumas del Siglo de Oro español, serán depositados en una nueva tumba en Ciudad de México, anunciaron este martes los organizadores de un homenaje que se hará por los 320 años de su muerte.

La tumba con los restos recién restaurados pero aún sin una confirmación genética podrán ser apreciados por el público a través de una gran ventana arqueológica ubicada en lo que se presume era su celda en el convento de San Jerónimo, hoy sede de la Universidad del Claustro de Sor Juana.

Para conmemorar el aniversario, la casa de estudios, que resguarda su memoria, prepara una serie de actividades para el 16 y 17 de abril que culminarán con una ceremonia fúnebre y el depósito de los restos.

Según diversos estudios de antropología forense hechos durante lustros, todo indica que los vestigios pertenecen a Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana.

La osamenta fue hallada en 1978 por Arturo Romano Pacheco, el primer antropólogo forense en México, junto con los cuerpos de unas 300 monjas del convento de San Jerónimo, actualmente sede de la universidad, en el centro histórico de la capital mexicana.

VEA TAMBIÉN: Comienzan a extraerse restos óseos de la cripta donde se busca a Cervantes

Allí fue enterrada la poetisa y ensayista mexicana cuando murió el 17 de abril de 1695, como pidió que se hiciera en un documento titulado "Testamento y renuncia de bienes de Juana Inés de la Cruz, novicia del convento de San Jerónimo. 23 de febrero de 1669".

Carmen Beatriz López Portillo, rectora de la universidad, explicó hoy en una conferencia de prensa que la razón por la que no se ha podido realizar una prueba de ADN es porque "en algún punto se ha roto la descendencia de la parte femenina de Sor Juana", necesaria para hacer una comparación.

Sin embargo, continuó, "se tiene un 99 por ciento de certeza de que son los restos de Sor Juana por los estudios morfológicos y de antropología forense", así como por las características del entierro.

A diferencia de otros cuerpos de monjas de la época, amortajados y sin lujos, en este caso se halló una osamenta femenina ataviada con traje de gala, un medallón y un rosario -también restaurado- de 2,80 metros con hilo de seda y vestigios de plata, objetos propios de alguien de gran rango.

El viernes, durante la ceremonia para depositar los restos en un nuevo sitio dentro de la misma Universidad del Claustro de Sor Juana, se escuchará una grabación con la lectura de la Oración fúnebre que escribió Octavio Paz cuando se cumplieron tres siglos de la muerte de la autora de Los empeños de una casa, El cetro de José, Carta a Sor Filotea de la Cruz y Villancicos.

Los dos días de actividades incluirán la cancelación de un timbre postal, nuevas publicaciones en torno a la monja jerónima, mesas redondas con prestigiados "sorjuanistas" de distintos países y conciertos de música de la época.


 

Temas

¡Recibe las últimas noticias en tus propias manos!

Descarga LA APP

Deja tu comentario

Te puede interesar