El Gobierno de Nicolás Maduro vive en una permanente crisis. Para ser más exactos, ante su probado fracaso al frente de Venezuela durante 16 años, el chavismo necesita de las crisis (léase las alienta, las provoca, no puede vivir sin ellas).
Quizás Maduro, tan dado a denunciar atentados, inminentes invasiones provenientes de Estados Unidos (por cierto, señor presidente, Washington parece haber hecho las paces con su otrora enemigo de La Habana y todo indica que lo han dejado solo en su cruzada antiimperialista) y planes subversivos orquestados por la CIA, la oposición y los paramilitares colombianos, ha vuelto a apelar a la tensión en la frontera para desviar la atención de los verdaderos problemas que ahogan al país
El Gobierno de Nicolás Maduro vive en una permanente crisis. Para ser más exactos, ante su probado fracaso al frente de Venezuela durante 16 años, el chavismo necesita de las crisis (léase las alienta, las provoca, no puede vivir sin ellas).
El chavismo, representado por Maduro, busca en las crisis la vía de escape a crisis presentes y futuras. El chavismo se sabe, se presiente, acorralado en las futuras elecciones legislativas y apela nuevamente a la tensión fronteriza con su vecina Colombia para (sospechan muchos) ampararse en un estado de excepción y, quizás, evitar una derrota en las urnas. Bueno, siempre le queda el recurso de violentar los resultados, dirían otros.
Quizás Maduro, tan dado a denunciar atentados, inminentes invasiones provenientes de Estados Unidos (por cierto, señor presidente, Washington parece haber hecho las paces con su otrora enemigo de La Habana y todo indica que lo han dejado solo en su cruzada antiimperialista) y planes subversivos orquestados por la CIA, la oposición y los paramilitares colombianos, ha vuelto a apelar a la tensión en la frontera para desviar la atención de los verdaderos problemas que ahogan al país.
Lo lamentable esta vez es que, de tanto jugar a las crisis, Maduro esta vez ha creado una de alcance humanitario.
El cierre de los cruces fronterizos con Colombia, aparejado a la deportación de más de 1.000 colombianos, ha separado familias y provocado un lamentable éxodo que llevó al expresidente Andrés Pastrana a catalogar a Maduro en entrevista con el canal NTN24 de “[Donald] Trump latinoamericano”.
Maduro necesitas las crisis. Los venezolanos necesitan un cambio de rumbo. Venezuela necesita un liderazgo que brinde soluciones en lugar de crear problemas.