jueves 28  de  marzo 2024
ENTREVISTA EXCLUSIVA

"La desconfianza en las autoridades mexicanas es total"

MIAMI.- José Miguel Vivanco, director de Human Rights Watch para Las Américas y Josefina Vásquez Mota, exsecretaria mexicana de Educación, culpan al Gobierno mexicano por la desaparición de los 43 estudiantes normalistas


"La desaparición de los 43 estudiantes [en México], es simplemente el síntoma de una crisis que se viene arrastrando desde hace muchos años. Se incrementó durante el gobierno del presidente [Felipe] Calderon, y  continúa hasta hoy, producto de una guerra contra el narcotráfico a sangre y fuego, en la que los militares han sido el principal instrumento utilizado por el Gobierno  para derrotar a los carteles", dijo José Miguel Vivanco, director de Human Rights Watch para las Américas.

José Miguel Vivanco denunció el clima de violencia que padece México en medio de la lucha contra el narcotráfico. (EFE)"Esto ha exacerbado un clima de violencia en el que hay atrocidades de los carteles de la droga y también de los agentes del estado, incluyendo policías municipales, estatales, federales, al igual que ejército y marina", añadió.

Las declaraciones de Vivanco fueron a propósito del escándalo desatado en México desde el 26 de septiembre pasado, tras el secuestro de 43 estudiantes de la escuela Normal Rural Ayotzinapa, en el Estado de Guerrero y durante su participación en un evento realizado en Miami al que asistieron líderes del continente, para disertar sobre política y democracia.

Debido a la repercución del suceso se creó una Comisión Mixta de Información, conformada por miembros de la Procuraduría General de la República (PGR) y familiares de los desaparecidos, con el propósito de agilizar las tareas de búsqueda de los normalistas. Dicha comisión fue el resultado de acuerdos entre el Gobierno federal y los padres de familia de los desafortunados alumnos.

Pero hace más de una semana,  el procurador Jesús Murillo Karam anunció que la institución bajo su cargo tenía los detalles de cómo habían sido "ajusticiados" los 43 normalistas y que parte de sus restos calcinados fueron lanzados al río San Juan y otros, botados en un basurero en el municipio de Cocula, todo esto en el estado de Guerrero.

Dichos restos fueron enviados a laboratorios forenses de Argentina y Austria. El equipo de antropología forense de Argentina notificó que  los restos enviados  no correspondieron a los 43 estudiantes desaparecidos. Mientras la Procuraduría General de la República está esperando los resultados científicos de Austria, a donde se enviaron muestras de lo encontrado en Cocula.

A pesar de las macabras narraciones de los presuntos asesinos, pertenecientes al cartel de la droga de Guerrero y que actuaron al parecer en complicidad con los militares,  ni los padres de las víctimas, ni sus compañeros de estudios, creen en esas versiones o que estén muertos. La procuraduría, no obstante  está relaizando sus propias investigaciones, y mientras no haya información científica contundente,  sigue calificando de desaparecidos a los normalistas.

¿Qué pasó?

Frente a la guerra contra el narcotráfico, desatada a fondo tras los dos períodos de mandaro del presidente Calderón, en México hay un amplio debate. Josefina Vásquez Mota, quien fuera Secretaria de Educación del Gobierno de Calderón, tiene su propia percepción de la violencia desatada por los narcos.

"Yo he dicho que en algunos de nuestros países las democracias llegaron sin tener un estado lo suficientemente eficaz, con instituciones sólidas", declaró Vásquez a DIARIO LAS AMÉRICAS. "Pero es claro que no debió haber sido una decisión fácil para el presidente Calderon: o esperar a tener instituciones más fuertes o hacerle frente al avance territorial del crimen organizado y la delincuencia. Creo, por lo tanto,  que el gran reto sigue siendo, hasta ahora, fortalecer al estado y construir uno mucho más eficaz".

Impunidad

Entretanto, la ciudadanía en México ha demostrado un descreimiento absoluto frente a la tarea de las instituciones de justicia, según se ha visto durante las semanas posteriores al secuestro de los estudiantes, con expresiones de protestas que han fluctuado entre la indignación y la violencia. Vásquez Mota, dijo al respecto que "el único camino  para recobrar la confianza es el cumplimiento irresticto de la autoridad, cero impunidad, transparencia y rendición de cuentas y que  la ley y el estado de derecho no tenga distingos, el no cumplimiento de la ley para los poderosos en detrimento de los más vulerables".

Por su parte Vivanco declaró que en su visita a los padres de los jóvenes desaparecidos, pudo ver de primera mano, una gran amargura y tristeza en esas familias, "se aferran a cualquier noticia o rumor que puedan confirmarles que sus hijos están vivos. 

También creo que están dispuestos a aceptar una respuesta distinta, como por ejemplo que sus hijos fueron finalmente ejecutados o asesinados ya sea por policías o por carteles, siempre y cuando esa conclusión sea verificada por organizaciones o instituciones en la que ellos confien.  Porque la desconfianza en las autoridades judiciales y políticas en Mexico es total". 

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