martes 26  de  marzo 2024
ASESORÍA LEGAL

¿Cómo buscar a un buen abogado?

Tenemos la responsabilidad de ser profesionales, de no abusar del desconocimiento de las personas y obrar con el ejemplo

Diario las Américas | RICARDO J. RODRÍGUEZ VACAS, ESQ.
Por RICARDO J. RODRÍGUEZ VACAS, ESQ.

Hoy me gustaría tocar un tema práctico que ojalá ayude a los lectores a mejorar sus interacciones con abogados y sirva para recordarle a mis colegas abogados sobre la necesidad de aplicar el profesionalismo. Mi deseo es que las personas que estén buscando una representación o consejo legal estén preparadas para encontrar a un buen profesional, responsable, y sobre todo, una relación de transparencia. Creo que los siguientes consejos les ayudarán conseguir a alguien con quien estén cómodos y confíen.

Ejemplo de un desastre

De vez en cuando me toca lidiar con abogados que dejan mucho que desear. Como en toda profesión, hay personas que son un desastre y que afectan negativamente a la comunidad profesional a la que pertenecen. A veces los casos legales son sencillos y fáciles de resolver pero son los abogados los que los complican y afectan negativamente al cliente.

Hace varios meses, Fulanito vino a mi oficina diciendo que quería un divorcio y que era supuestamente sin disputa, después de entrar en un contrato con él y proceder con la representación, le entregué los documentos a su pareja. Le informé a su futura exmujer que la ley no me permitía brindarle consejo legal ya que yo representaba a su marido pero que ella tenía todo el derecho a que otra persona o abogado revisara los papeles. Entonces, ella le llevó los papeles a una abogada.

Jamás en mi vida pensé que algo generalmente sencillo se convirtiera en una pesadilla. El problema surge cuando los abogados “buitres” ven una oportunidad en un cliente que no sabe nada de la ley y crea una falsa situación para justificar más trabajo legal de lo necesario, y así le permite cobrarle más al cliente. A veces esto pasa y el cliente no se entera, ni entiende, o no quiere aceptarlo.

Al día de hoy, ese divorcio no se ha podido finalizar por varias razones, causadas principalmente por la abogada. Es que operar como una factoría que valora volumen en vez de calidad, tener un equipo que pierde papeles y no es organizado, no ser claro con el cliente y con el abogado contrario, y la falta de liderazgo profesional son recetas para el desastre. Por eso les recomiendo a los clientes que analicen bien antes de contratar un abogado.

Alertas y Consejos prácticos

Como todo, uno tiene que decidir lo que quiere. Es lo mismo que ir a un médico, hay algunos exclusivos y hay otros que trabajan de forma muy impersonal, como si estuvieran manejando una ganadería. A veces no hay dinero, pero cuando lo hay, uno debe ser muy meticuloso y pausado en su selección. El abogado pequeño y el abogado de una oficina grande viven en diferentes mundos. Ninguno es mejor que el otro, sólo usted puede decidir cuál es mejor para usted.

Yo como abogado no puedo evitar lidiar con un abogado que ha sido contratado para representar la parte contraria, pero la parte contraria puede elegir a un buen abogado que evite muchos problemas que eventualmente le van a beneficiar económicamente y personalmente. Escoger bien ayuda a todos.

En toda interacción humana, la transparencia y la claridad en la comunicación suelen determinar la solidez de los acuerdos e entendimientos. Como sabemos, el dinero es esencial para hacer andar el motor legal, por eso lo primero que uno debe hacer al comunicarse con un abogado es aclarar cómo se va proceder, cuánto habrá que pagar en cada etapa del proceso y de qué forma se hará.

Generalmente la primera etapa es la consulta. Algunas son gratis y otras se cobran. Cualquiera que sea, es importante saberlo antes de comenzar para evitar tensión y malos entendidos. La responsabilidad debe ser del abogado en informarle al cliente. De todas maneras, recomiendo a los clientes que pregunten siempre sin vergüenza y no supongan nada. Es mejor quedar como insistentes que desayunarse con que deben pagar algo que no sabían.

Abogados de riesgo

Si usted tiene dificultades para hablar por teléfono con su abogado, si sus mensajes nunca se contestan o se contestan tarde, si siempre le contesta una secretaria, si se pierden sus papeles o documentos, o si no son claras las comunicaciones -especialmente los contratos de representación que incluyen los gastos y costos de representación-, usted y su caso estarán en riesgo, prepárese para lidiar con problemas extras y sorpresas no esperadas.

Evite estas situaciones. Haga sus investigaciones. Utilice las herramientas de internet para ver opiniones e historiales del abogado que desea contratar. Visite el sitio del colegio de abogados para ver si su abogado ha sido sancionado (en la Florida: www.floridabar.org), y trate de obtener referencias de personas conocidas que hayan utilizado a un abogado en particular. Después de seleccionar a un abogado y conocerlo, tome su tiempo en analizar y decidir si desea su representación oficial.

Algunas preguntas importantes para finalizar el proceso son: ¿Me ha explicado lo que cubre mi representación y lo que no cubre por el precio que me ha indicado? ¿Si me ha dado un precio, me ha detallado qué cuesta qué? ¿Si me quiere representar por un porcentaje, cómo se va distribuir el dinero, qué pasará si el caso no se gana?

Asegúrese de preguntar muy bien y obtener por escrito el contrato de representación que explique en detalle todos los temas financieros entre usted y el abogado. Así, la relación será más transparente y mejor para ambas partes.

Conclusión

Somos humanos pero tenemos responsabilidades. Los abogados sabemos que a veces los clientes no son fáciles y a veces son irresponsables, pero nosotros tenemos la responsabilidad de ser profesionales, de no abusar del desconocimiento de las personas y obrar con el ejemplo. Si se comienza una relación clara y transparente desde la primera consulta, mediante un acuerdo o contrato de representación legal que cubra los detalles del trabajo legal, es un buen comienzo para las dos partes.

Al cliente, le recomiendo que priorice por estar cómodo con su abogado. Si le gusta la manera en que se maneja y el precio por sus servicios, perfecto. Pero si usted siente que algo huele mal, le aconsejo  que confíe en sus sentimientos y busque otro antes de avanzar en el proceso legal. Investigue, demande claridad, y entre en un acuerdo sólido.

Usted se merece el mejor servicio de un abogado, independientemente de que sea acusado de violar una ley, o que le haya pegado los tarros a su mujer y ahora su pareja quiera divorciarse, o de que no sepa manejar sus finanzas y ahora esté en bancarrota, etc. Hay infinitos problemas que se manifiestan diariamente en nuestra sociedad pero el papel del abogado no es juzgar sino representar al cliente buscando el máximo beneficio de la ley para darle el mejor resultado a su caso particular. 

¡Recibe las últimas noticias en tus propias manos!

Descarga LA APP

Deja tu comentario

Te puede interesar