jueves 28  de  marzo 2024
TRANSPORTE PÚBLICO

En manos de Comisión de Miami-Dade decisión de privatizar 10 rutas de autobuses

Una sistemática baja en los usuarios del sistema público de transporte y una obligación legal de mantener un presupuesto balanceado, serían las razones para pedir a la Comisioin la autorización para privatizar diez rutas de autobuses del Condado
Diario las Américas | SERGIO OTÁLORA
Por SERGIO OTÁLORA

MIAMI.- Este martes la Comisión del condado Miami-Dade aprobará o no si se privatizan 10 rutas de autobuses y se cancelan otras tres, medida que, según cálculos de la administración condal, traería un ahorro anual de 10.046.000 de dólares.

Ese ahorro se desglosa de la siguiente manera: 5.075.000 al reforzar los recorridos y cambiar las frecuencias; y 4.970.000 al cancelar rutas que se duplicaban, es decir, que las cubrían autobuses del condado y de los municipios, los llamados trollys. En Miami Beach, por ejemplo, se cancela la ruta que pertenecía al Condado, y la asume la ruta 123 del Trolly de ese municipio.

La empresa que operaría las diez rutas es Limousines of South Florida, bajo el contrato 18483 de la Ciudad de Miami, que sería el mismo que operaría para el Condado, por una razón que clarifica la directora del Departamento de Transporte y Obras Públicas, Alice Bravo: “No hay necesidad de licitación, porque la ciudad ya hizo el proceso y la constitución de la Florida lo permite. Si un municipio ha hecho ya una licitación, otra ciudad puede usar ese contrato con la misma compañía”.

Discriminación

El sindicato de trabajadores del transporte se ha opuesto de manera radical a esta medida. No sólo la ha calificado de discriminatoria e incluso racista, porque supuestamente afecta de manera primordial a sectores de bajos recursos –de la comunidad afroamericana e hispana- sino de peligrosa porque se abre un mal precedente, que podría terminar en la privatización de una parte importante del sistema público de transporte.

El gremio tenía 20 días para presentar una propuesta alternativa a la entrega de esas rutas a los particulares, pero el plazo se cumplió y no entregó ningún plan para evitar esa medida, que será discutida por los comisionados este martes.

En un e-mail a los comisionados, el sindicato alegó que el Departamento de Transporte y Obras Públicas no había cumplido con la entrega de la documentación clave con el propósito de que los miembros de la organización de los trabajadores pudieran hacer una contrapropuesta. Ellos argumentaron que en tres ocasiones pidieron la información sin respuesta.

Sin embargo, Bravo indicó que el pasado mes de marzo le dio al sindicato el contrato de operación de las diez rutas. “Nosotros les dimos toda la información y no hay ninguna pregunta que el sindicato haya formulado que nosotros no hayamos respondido”, puntualizó Bravo.

Baja en pasajeros

Una de las justificaciones para proponer la privatización de esas rutas es la caída en el uso de los autobuses y, por lo tanto, en los ingresos del sistema público de transporte.

De acuerdo con cifras ofrecidas por Bravo, en 2014 los ingresos por pasajes fueron de 95 millones de dólares. En 2015, descendieron a 91 millones de dólares. En 2016 bajaron a 84.8 millones de dólares. Para 2017 se proyecta que caigan a 73 millones de dólares, un 14% menos que el año anterior.

“Hay que recortar los costos para no terminar en rojo”, precisó Bravo, quien argumentó que la privatización “nos permite mantener esas rutas y reducir los costos”.

Sobre ruedas varios proyectos de transporte masivo para Miami
<p>El Metrorail podría ser extendido hacia el sur, pero es un proyecto que tardaría hasta ocho años (JESÚS HERNÁNDEZ)</p>

El Metrorail podría ser extendido hacia el sur, pero es un proyecto que tardaría hasta ocho años (JESÚS HERNÁNDEZ)

Los tiquetes que compran los pasajeros para ir en un autobús o en el Metrorail representan entre el 25% y el 28% del presupuesto total del sistema de transporte público. “Si los ingresos bajan tenemos que ajustar el sistema”, indicó Bravo. Por otra parte, el presupuesto de los condados, por ley de la Florida, debe ser balanceado. No puede haber un déficit en el gasto, como sucede en el gobierno federal.

Lo más complejo de esta situación es que los residentes, cuando baja el precio de la gasolina y mejora su situación económica, no permanecen en el sistema público y, en lugar de utilizan el tren o las rutas de autobuses, deciden comprar un auto para rodar por la intensa congestión del Condado.

¡Recibe las últimas noticias en tus propias manos!

Descarga LA APP

Deja tu comentario

Te puede interesar