jueves 28  de  marzo 2024
OPINIÓN

Los cubanos, con la vista en Trump

Es de esperar que cualquier anuncio sobre cambios despierte posiciones encontradas entre quienes apuestan por mantener el acercamiento con La Habana y los que defienden un endurecimiento de las posiciones de Washington
Diario las Américas | EDITORIAL DIARIO LAS AMÉRICAS
Por EDITORIAL DIARIO LAS AMÉRICAS

Hace casi tres años y medio, cuando el presidente Barack Obama decidió restablecer las relaciones diplomáticas con Cuba, el mundo pensó que el llamado acercamiento serviría para pavimentar el camino de la isla caribeña hacia la democracia.

No se trataba sólo de limar asperezas entre ambas naciones, que fueron producidas por una revolución totalitarista y el embargo de empresas estadounidenses hace cincuenta y tantos años. Washington apostó además por un borrón y cuenta nueva que abogaría por la creación de un estado de Derecho en la mayor de Las Antillas del mar Caribe.

Pero la jugada, que tomó muy poco en cuenta la experiencia de los cubanos exiliados y de la isla con la dictadura de los Castro, ha sido cuando menos lenta, sino fallida, ante los intereses políticos y económicos que defiende la dictadura cubana.

Ahora los cubanos de la isla, Miami y el resto del mundo miran con atención hacia las posibles medidas del presidente Donald Trump para revertir algunos de los cambios de política hacia Cuba promovidos por la administración de Obama.

Es de esperar que cualquier anuncio sobre cambios despierte posiciones encontradas entre quienes apuestan por mantener el acercamiento con La Habana y los que defienden un endurecimiento de las posiciones de Washington. Nadie puede asegurar qué pasará, pero todos sabemos que los años continúan pasando y que ni el llamado deshielo con EEUU, plagado de propuestas y concesiones para La Habana, no fue capaz de suavizar el totalitarismo político de los Castro, ni su absolutismo en las riendas de la economía del país.

A lo anterior se suma la incuestionable existencia de intereses de la nación estadounidense en la isla, luego de que el Gobierno anterior concediera licencias y animara a las empresas a invertir millones de dólares en el país caribeño.

De cualquier manera, además de revisiones y cambios es necesario promover un cónclave solidario internacional sincero, que no sólo reconozca la existencia de un régimen totalitario en Cuba, sino además que le exija la esperada transformación que conduzca a la democratización de la isla.

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