sábado 23  de  marzo 2024
Nicaragua

Desapariciones forzosas pesan sobre la dictadura de Daniel Ortega

Esperanza Salgado denunció la desaparición de su hijo ante la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), dijo haber hallado el cuerpo de una persona que podría ser su hijo. Se trata de un hombre decapitado, quemado y enterrado en una fosa hasta hace poco clandestina
Por JUDITH FLORES

Judith Flores

@FloresJudith7

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Miami - "Lo que quiero es que me digan dónde está enterrado", es la súplica de Esperanza Salgado, quien desde hace más de un año busca a su hijo Ervin Gallo Salgado, secuestrado el 6 de julio de 2018 por la Policía y paramilitares en la ciudad de León, en el occidente de Nicaragua, durante la “operación limpieza” que ordenó el régimen de Daniel Ortega para limpiar los tranques y desmantelar las protestas.

Ervin Gallo Salgado es uno de las decenas de desaparecidos que quedaron como saldo de la represión gubernamental surgida contra las protestas populares, en rechazo a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, que iniciaron el 18 de abril del 2018.

Del tema casi no se habla; los familiares poco se animan para denunciar la desaparición forzosa de sus seres queridos ante el acoso de las autoridades y los grupos paramilitares. Los buscan en medio de angustia, incertidumbre y silencio en hospitales, morgues, las cárceles y preguntando a personas que podrían proporcionarles una pista que los lleve a dar con el paradero de su familiar.

Cuerpo decapitado y quemado

Así ha sucedido con Esperanza Salgado que denunció el caso de su hijo ante la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH). Ella dijo haber localizado una fosa, hasta hace poco clandestina donde supuestamente está enterrado el cuerpo de una persona que podría ser su hijo. Se trata de un hombre que fue decapitado, posteriormente quemado y enterrado en esa fosa, pero Salgado necesita la autorización de la Policía Nacional para exhumar el cuerpo.

“La Policía me dijo que por mi hijo no iban a mover ni un dedo, estoy desesperada, soy su madre y a mí me duele mi hijo. Tengo un año buscándolo, le pido que me lo entreguen vivo o muerto para enterrarlo yo, que me den una pista para encontrar a mi muchacho”,dijo Salgado durante una conferencia de prensa en la CPDH, en Managua, el pasado 20 de agosto.

Esperanza Salgado necesita la exhumación del cadáver para verificar si se trata de su hijo y darle cristiana sepultura, o seguir buscando hasta encontrarlo.

A Ervin Gallo Salgado se le conocía como “el teacher” por sus conocimientos, es ingeniero en sistemas y se puede comunicar en idioma inglés que aprendió bien en Estados Unidos. Es uno de los llamados auto convocados, que participó en las protestas, estuvo en el tranque de la barriada La Pintora, localizado en la carretera León-Chinandega, de ahí se lo llevaron secuestrado, la Policía en conjunto con paramilitares, iba herido en una pierna lo que le dificultó ponerse a resguardo cuando el régimen realizaba la “operación limpieza” en las calles donde había resistencia contra la dictadura Ortega-Murillo. Ese día antes de que se lo llevaran hubo un enfrentamiento entre la Policía y paramilitares con los auto convocados, el saldo fue de tres opositores muertos. Desde entonces, a Ervin no se le ha visto más.

Un día después, según los medios locales en León, apareció una persona quemada en el interior de un vehículo en la comunidad Troilo, en Sutiaba, al noroeste de la ciudad de León, y según testigos fue la misma Policía quien sepultó el cadáver en el lugar de los hechos.

Lo anterior es parte de las averiguaciones que ha realizado sin ayuda de las autoridades la madre de Salgado. Ahora que ha encontrado una pista sobre el posible paradero de su hijo la Policía rehúsa autorizar la exhumación del cuerpo.

Xavier Mojica tenía 21 años cuando desapareció en un barrio capitalino en Managua. Su madre Lorena Centeno declaró a los medios de comunicación que ha buscado sin cesar a su hijo en lugares como Medicina Legal, hospitales, y en la Policía. La denuncia de la desaparición de su hijo la ha mantenido constante en las redes sociales.

"Yo sé que mi Xaviercito está vivo, solo quiero que me digan dónde está", suplicó ante los medios de comunicación.

No existen datos precisos de desaparecidos

El Comité de Presos Políticos en Nicaragua denunció a finales de mayo pasado que un total de 102 personas estaban desaparecidas luego de ser detenidas por la Policía. La organización publicó en su sitio que trabajaba en la confirmación del paradero de los desaparecidos. El listado fue publicado en su sitio web.

El número de desaparecidos fue confirmado por la directora del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez de Escorcia, organismo a quien el régimen le canceló la personería jurídica.

En su informe publicado a finales de julio, el Comité de Presos Políticos, publica dos nuevos desaparecidos: Sara María Centeno y Deybin Antonio Mairena Centeno, ambos de Matagalpa.

Pero la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH), que monitorea la situación desde Costa Rica registra en su último informe 855 desaparecidos en Nicaragua hasta junio de 2019.

La misma organización reportó la existencia de dos fosas comunes en el departamento de Carazo, donde fueron sepultados de manera oculta cadáveres de personas asesinadas en el contexto de las protestas.

Pero esos hechos solo podrían ser investigados con un nuevo gobierno, el actual régimen rehúsa investigar los crímenes y desapariciones forzosas, que tuvieron lugar en el contexto de las protestas. Mientras, los familiares de la víctima enfrentan la ausencia de sus seres queridos y enfrentan duelos incompletos.

FUENTE: REDACCIÓN y la colaboración de Bismarck Lebrón, en León, Nicaragua.

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