MIAMI.- La conocida caricaturista venezolana Rayma Suprani. (Foto JOSÉ J. BLANCO H.)
MIAMI.- La polémica dibujante dijo que los venezolanos viven en un estado constante de locura surrealista con atropellos, angustia y ansiedad
MIAMI.- La conocida caricaturista venezolana Rayma Suprani. (Foto JOSÉ J. BLANCO H.)
JOSÉ PERNALETE / DLA
@jpernalete
Luego de 19 años continuos de trazos, risas y reflexiones en sus viñetas diarias, la caricaturista venezolana Rayma Suprani decidió ampliar su plataforma gráfica con miras a toda Latinoamérica. Lo que fue una salida forzada del periódico El Universal por “ser molesta para los nuevos dueños”, se ha convertido en una oportunidad para afilar más su crítica.
En entrevista con DIARIO LAS AMÉRICAS, la artista reiteró que como editorialista gráfica de ese rotativo venezolano, siempre pudo expresarse libremente y contó el apoyo de lo que fue su gran escuela hasta septiembre de este año. “Mi salida se decide por una caricatura sobre el deterioro de la salud en Venezuela. Tenía la firma del fallecido presidente [Hugo] Chávez, eso desmontaba la idea mítica iconográfica de que es algo bueno lo que sucede en mi país, cuando en realidad es todo lo contrario” afirmó.
Reconoció que “haber elegido a un militar golpista como presidente fue un gran error. La política [del chavismo] ha sido una de las más nefastas de la historia”, subrayó.
“Venezuela está en el oscurantismo, en tiempos complicados, los venezolanos sufrimos y vivimos en un estado constante de locura surrealista con atropellos, angustia y ansiedad”, lamentó.
Además, compartió la tristeza generalizada de aquellas familias que deben dividirse tras la decisión de emigrar y afirmó que se trata de una generación “maravillosa e inteligente que ofrece todo su talento en otras latitudes”.
"Tenemos comedia"
Para Rayma, la voluntad de lograr el cambio está dentro de cada quien y dejó bien claro que “no va a llegar algún superhéroe o algo parecido a devolvernos el país que perdimos”. Sin embargo, teme que el venezolano no resista el sometimiento de barbarie cotidiano y no logre ganar el espacio merecido con el respeto mutuo.
Resumió que Venezuela “vive en una constante tragedia, pero siempre nos queda el humor, que nos salva, afortunadamente"'.
También mostró preocupación por el acorralamiento de las libertades en la nación y por el hecho de que el régimen ha cerrado medios de comunicación como televisoras y emisoras de radio, “dejando de postre a la prensa escrita”.
“Aunque han comprado la mayoría de los medios, quedan bastiones que libran batallas admirables, resistiendo la asfixia por la falta de papel y divisas, como los diarios El Nacional, Tal Cual, El Carabobeño y El Impulso, entre otros”.
Fin de un ciclo
Su salida obligada de El Universal la llevó a buscar horizontes más amplios, basados en una tribuna universal de crítica gráfica. “Estoy comprometida con las libertades. Mi trabajo no es solo crear humor sino hacer pensar”, destacó.
Si sus dibujos molestaron a sectores oficialistas, ahora sus caricaturas se enfilan a otros escenarios nada ajenos al venezolano. Aseguró que “se cierra este ciclo pero Rayma va más allá, con un proceso creativo activo que me lleva a reinventarme y buscar otras plataformas”.
No sólo confesó que le agradan las historietas de la popular Ramona, publicadas en DIARIO LAS AMÉRICAS, y que al dibujar prefiere el silencio para lograr su arte.
Adelantó que le gustaría contar historias a través de dibujos y explorar el escenario latinoamericano con un lenguaje universal.
"Mafalda fue la traductora del Sur, nos dio un lenguaje de ideología y de derechos humanos. Fue una libertaria y creo que esa saga sería bueno continuarla con otros personajes”, concluyó.