Ahora, tras los severos daños a sus instalaciones nucleares ya su capacidad para construir armamento atómico, el régimen de los Ayatolás se lame sus heridas y busca el abrazo de sus cómplices
El “Pollo” carvel cantó finalmente y muchos de los aludidos que aún no conocemos a buen seguro se echaron a temblar. El que fue jefe de la Inteligencia chavista se declaró culpable de cuatro delitos y puede poner en aprietos a sus antiguos superiores detallando sus vínculos con el narcotráfico y el terrorismo.
Además “El Pollo” afirma tener pruebas que detallan los profundos y continuos vínculos entre Venezuela y la República Islámica de Irán. Según Carvajal, estos vínculos incluyen la cooperación en materia de seguridad, inteligencia y transacciones financieras destinadas a saltarse las sanciones de Estados Unidos. Sobre la relación entre Irán y Venezuela, muchos han insistido que es algo meramente simbólico en aras de la propaganda pero las revelaciones de Carvajal podrían tirar abajo esta teoría. Podría ser más operativa de lo que la mayoría de la gente sospecha, reveló el ExGeneral preso en los Estados Unidos.
Nada más comenzar los bombardeos de Israel contra Irán, Maduro quiso dejar muy claro de qué lado estaba y apoyó al régimen de los Ayatolás. Días después cuando se sumó Estados Unidos a la guerra, calificó de “vil ataque” la operación y aseguró que había sido “una acción criminal que viola las normas del Derecho Internacional, la Carta de las Naciones Unidas e incluso ignorando las leyes estadounidenses, colocando en peligro la vida y la paz”.
Ahora, tras los severos daños a sus instalaciones nucleares ya su capacidad para construir armamento atómico, el régimen de los Ayatolás se lame sus heridas y busca el abrazo de sus cómplices, los sospechosos habituales y enemigos de los Estados Unidos y de Occidente.
Seguro que Rusia y China pueden ayudar mucho más a Jamenei en sus próximos movimientos pero seguro que no va a despreciar la mano tendida de Maduro. Porque la respuesta de Irán frente a Estados Unidos y todos los países que apoyaron el ataque no vendrá en forma de operación militar convencional. Nunca Irán usó las armas de frente. Su especialidad es el terrorismo anónimo, cobarde, negociado bajo la mesa con socios inconfesables. Ahí radica la importancia de lo que pueda haber contado Carvajal. El modus operandi de Irán realizando atentados data desde los orígenes del actual régimen de los Ayatolás instaurado con Jomeini a la cabeza, allá por 1979.
En un primer momento, Jomeini y los islamistas fueron apoyados y agasajados por la izquierda de salón europea, satisfecha por el fin del periodo de otro dictador como fue el Sha de Persia. Desde 1979, Irán ha entrenado, financiado y proporcionado armamento a grupos terroristas como Hezbolá en el Líbano, Hamás en Gaza o la Yihad Islámica.
Países como Argentina, Albania, Dinamarca, Francia,India, Kenia, Tailandia o Estados Unidos han acusado a Irán de estar detrás de atentados terroristas cometidos en su territorio. Especialmente doloroso y cruel fue el ataque contra AMIA en Buenos Aires. En la mañana del 18 de julio de 1994, un coche bomba destruyó el edificio de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), el principal centro comunitario de la colectividad judía en Buenos Aires. El ataque, ocurrido apenas dos años después de la voladura de la embajada israelí, ocurrido también en la capital argentina, fue el peor atentado en la historia de Argentina. 85 personas murieron y cerca de 300 resultaron heridas. Irán ordenó y Hezbolá ejecutó. Pasaron muchos años hasta que hubiera luz sobre la responsabilidad de este ataque debido al manto de impunidad impuesto por los Kirchner. De nuevo, la izquierda abrazando el islamismo radical y de nuevo ese terrorismo actuando a sus anchas por países de América Latina.
Hay que esperar más detalles para conocer las revelaciones de Carvajal pero lo que está claro es que los iraníes no van a aceptar la humillación de la derrota infligida por Estados Unidos e Israel. Ya los yihadistas se mueven en los infiernos pensando en su próxima maldad y para ello cuentan con aliados como Maduro o Diosdado Cabello.
Hacen mal aquellos que le quitan importancia a esta relación y los que han promovido la salida de las empresas estadounidenses de Venezuela. A ese niño malcriado que es el chavismo es mejor tenerlo atado en corto y manejar sus negocios estratégicos antes de que estos se negocios caigan en manos de la inexistente ética política y empresarial de rusos, chinos o iraníes.
Si a la presión a las empresas americana para que salgan de Venezuela se une la política “America first” de no inmiscuirse en los asuntos internos de otros países (gran noticia para Maduro, Ortega y Díaz-Canel), se pueden venir años muy oscuros de enquistamientos de regímenes autoritario en América Latina.
Señores de la administración Trump, hagan caso al “Pollo” y pongan freno a la infiltración iraní en Venezuela y otros países. No vaya a ser que tengamos que lamentar tragedias como las vividas en el pasado.
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