martes 4  de  febrero 2025
CRISIS

Aumento de la migración por el Darién impacta en Costa Rica

En los últimos meses, más de 400.000 migrantes han ingresado a Panamá a través del Darién, y una parte significativa de ellos llega a Costa Rica

Por REDACCIÓN/Diario Las Américas

SAN JOSÉ.- La creciente migración de personas que cruzan la peligrosa Selva del Darién en su camino hacia Estados Unidos está teniendo un impacto significativo en Paso Canoas, una pequeña localidad en la frontera entre Costa Rica y Panamá, donde se observa un flujo constante de migrantes que llegan agotados y en condiciones precarias, lo que levó al gobierno costarricense a tomar medidas para hacer frente a esta situación.

En los últimos meses, más de 400.000 migrantes han ingresado a Panamá a través del Darién, una cifra que supera con creces los 248.000 registros del año anterior, según datos oficiales panameños. Estos migrantes, en su mayoría procedentes de Venezuela, continúan su viaje hacia el norte, y una parte significativa de ellos llega a Costa Rica.

El campamento improvisado en Paso Canoas, establecido por el gobierno costarricense en mayo, se ha convertido en un punto de parada crítica en esta ruta migratoria. Los migrantes llegan exhaustos después de atravesar la selva, enfrentando hambre, condiciones climáticas adversas y riesgos para su salud. Las enfermedades digestivas y respiratorias son comunes, y las organizaciones no gubernamentales como Cadena brindan atención médica de manera continua.

Costa Rica declara "emergencia nacional"

El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, declaró esta situación como una "emergencia nacional" debido al gran número de personas que atraviesan el país. Como parte de la respuesta a esta emergencia, se abrió el Centro de Atención Temporal a Personas Migrantes (Catem), ubicado a 11 km al norte de Paso Canoas. Este centro tiene como objetivo proporcionar un entorno más adecuado para los migrantes, con atención médica, comidas, letras y colchones para menores, ancianos y enfermos.

Elías Quesada, subdirector de la Policía de Migración de Costa Rica, destacó que el Catem cuenta con espacios idóneos para atender a los migrantes y está trabajando en colaboración con agencias de la ONU como Unicef, Acnur y OIM.

A pesar de estas medidas, la situación sigue siendo desafiante, y muchos migrantes siguen esperando el dinero necesario para continuar su viaje en un país que no es el suyo. Esmeralda Cuica, una migrante venezolana, agradece estar en el Catem en lugar de Paso Canoas, describiendo el campamento fronterizo como un lugar de "supervivencia todos contra todos".

El gobierno costarricense colabora con otros países de la región y organizaciones internacionales para abordar esta crisis migratoria de manera coordinada y brindar asistencia a aquellos que buscan un futuro mejor en Estados Unidos.

FUENTE: Con información de AFP

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