MIAMI.- BEATRIZ E. MENDOZA
MIAMI.- Un periodista y una médium se reúnen en la torre de una casa en Santiago de Cuba donde la mujer canaliza el espíritu del fallecido gobernante que se somete a las preguntas del reportero
MIAMI.- BEATRIZ E. MENDOZA
El autor de El Oráculo del Magno Ramsés y El apocalipsis según Ramsés, Ramsés Naser, se ha valido de la plataforma de autopublicación de Amazon para dar a conocer su más reciente trabajo titulado ¡He muerto! Biografía póstuma no autorizada de Fidel Alejandro Castro Ruz.
El mismo es catalogado como ficción biográfica, pero incluye otros elementos como la carta astral de Fidel Castro o un apartado con numerología del dictador. Un periodista y una médium se reúnen en la torre de una casa en Santiago de Cuba donde la mujer canaliza el espíritu del fallecido gobernante que se somete a las preguntas del reportero, y de esta forma se narra la vida de Castro.
DIARIO LAS AMÉRICAS entrevistó a Naser, quien es investigador de fenómenos paranormales, y además estudió y ejerció como actor en su natal Cuba.
¿Cómo surgió la idea de escribir este libro?
Luego de largo tiempo estudiando, observando, tratando de interactuar en el proceso histórico de lo que sucedió en Cuba, surgió la necesidad de darme una respuesta a qué motivos causaron ese proceso y por qué ha durado más de la mitad de un siglo. La personalidad de Fidel es compleja; sus razonamientos y motivaciones están ocultos y blindados en su subconsciente. Había que lanzarse a bucear en ese mar de su inconsciente y revelar a través de sus acciones su carácter. No sólo el de él, sino el del pueblo de Cuba, además de las circunstancias mundiales que rodean el caso.
Durante mi proceso de formación, tuve una intensa práctica he investigación sobre la mística y tropecé con Romain Rolland, uno de mis literatos franceses preferidos. Después de su éxito con Juan Cristobal, escribió dos tomos sobre la vida de dos Swamis, devotos de la corriente monista, no dualista, en la India, maestro y discípulo, y los tituló con el nombre de ambos: Vida de Ramakrishna y Vida de Vivekananda, algo que me sorprendió, dado que Rolland era miembro del partido comunista francés y en su caso, por su sensibilidad era un caso excepcional, el saltar del materialismo a la religión o a la filosofía idealista.
Fue de este último Swami y de la lectura de su evangelio, donde encontré una frase de Vivekananda que me llamó intensamente la atención y que me sirvió como punto de partida para estudiar el proceso cubano y el affaire Fidel Alejandro Castro Ruz: "Nada desaparece de la historia, mientras le es necesario al género humano". A partir de ahí se produjo el pistoletazo de salida. ¿Hasta qué punto lo acontecido en Cuba fue necesario para los cubanos y para el mundo circundante de sus relaciones exteriores? Nadie mejor que Fidel para contarlo al morir, siendo ya espíritu, es decir desde una dimensión que no le impide realizar su confesión, de aquello que ocultó y no dijo en vida. Por eso He Muerto es su último discurso y su última entrevista.
¿Cuánto tiempo le tomó escribirlo desde que tuvo la idea inicial, hasta que hizo la investigación, redacción, edición y publicación?
Fue un total de tres años. No fue fácil incorporarlo, por decirlo en el lenguaje técnico del actor, lo que se conoce como "la incorporación del personaje”. Hay que estudiar su lógica de conducta, entendiendo todo lo que sucede en él sin dejarse influenciar por posiciones políticas. Entrar y salir de la psicología de este personaje fue un trance muy complejo y por ello tuve que tomarme mi tiempo. Es posible que me ayudara mi experiencia en artes escénicas.
Describa la voz narrativa del libro y cuente por qué decidió contar la biografía de Fidel Castro de esta manera.
En referencia a la narración de partes del libro, no hay un narrador con nombre, una persona o personaje que describa la acción en la trama, como tal. Es como en la tragedia griega, la voz del coreuta, que desde el proscenio de la historia, desde esa dimensión de ese mundo espiritual, narra, describe por momentos, su testimonio. La decisión fue un proceso, hay abundantes elementos alrededor de su vida y de la de los cubanos acerca de ese mundo mágico, de hechizos, de médiums y babalawos que parecen inevitablemente orbitar en la historia de Cuba. Nada mejor que la ciudad de Santiago de Cuba, escenario del inició de su revolución, nada mejor que el fantasmagórico escenario del ocultamiento en la torre de una casona santiaguera, de una médium, a propósito llamada Patria, quizá el espíritu merodeador de Celia Sánchez Manduley, su confesora y secretaria, y un periodista muy sagaz para describir si, efectivamente como enuncio en 1953, “La historia lo absolvió” "o su pueblo lo condenó".