MIAMI.- Con casi cuatro décadas de trayectoria en su haber, Jerry Rivera asegura que siente nostalgia al escuchar la música de los años 90, cuando sus canciones sonaban en la radio y se abría camino en pleno auge de la salsa romántica.
Jerry Rivera sobre su próximo disco, Llegué yo, el primero que lanza en más de una década, repasa sus inicios y celebra que su hijo, Moa, siga sus pasos en la música
MIAMI.- Con casi cuatro décadas de trayectoria en su haber, Jerry Rivera asegura que siente nostalgia al escuchar la música de los años 90, cuando sus canciones sonaban en la radio y se abría camino en pleno auge de la salsa romántica.
“A veces no puedo ni siquiera escucharla, porque me da tanta nostalgia, me trae tantos recuerdos bonitos, que a veces, no puedo oír esa música de la época de Luis Enrique, Eddie Santiago, Frankie [Ruiz], que surgieron antes de mí. Y parece que fue ayer”, dijo Jerry Rivera, en entrevista con DIARIO LAS AMÉRICAS, sobre esos años en los que su carrera despegaba con temas como Cara de niño y se daba a conocer como el Bebé de la Salsa.
Por estos días, el cantante celebra el lanzamiento de Pa’eso es la vida, que llega antes del tema con el que finaliza y da título a lo que será su nuevo disco.
“Yo había hablado con Juan Miguel, productor del disco y compositor de la mayoría de las canciones. Me pasó como en la época de Amores como el nuestro, cuando le dije a Omar Alfanno que en un mundo faltó de que se hable de amor, había que hacer letras que hablaran de amor, del cariño, de la amistad, de la familia, de valores. Y veníamos contemplando la idea de una canción que hablara de eso, hasta que logramos hacer el tema Pa’eso es la vida”, contó.
“La canción se enfoca en los valores, en la unión familiar, habla de que en la vida hay muchos propósitos dependiendo de las personas, pero, sobre todo, que lo importante es amar y ser amado y que todo sea para la gloria de Dios. Con estos dos temas, Pa’eso es la vida y Llegué yo, cerramos el disco nuevo”, añadió.
El nuevo material discográfico, en el que comenzó a trabajar hace un año, es el primero que lanza en más de una década.
“Ya cumplimos un año desde que comenzamos a lanzar canción por canción. La gente pregunta cuándo voy a lanzar el disco, pero no voy a grabar un disco y lanzarlo completo porque le resto importancia a cada tema. 15 años de no grabar un disco como tal, mucho tiempo”, dijo.
A la pregunta de por qué esperó tanto para volver a entregar un álbum musical, respondió:
“No tenía motivación. Se supone que uno puede tener razones personales, pero no necesariamente son razones que justifican. Yo no tenía motivación, no tenía esa hambre de grabar. Me gusta grabar canciones, quería divertirme grabando una que otra, pero no tenía esa determinación, no quería esa responsabilidad de grabar un disco entero. Y creo que llegó el momento en el que no pudimos escapar más”, dijo.
“Escuchaba muchas canciones que me enviaban diferentes compositores, pero yo les decía: no sé si es que estoy desmotivado o si es que la música que estoy escuchando no me enamora, no me emociona. Y pues, sinceramente, se debía a que yo tenía que envolverme más en el tema de las ideas para así mismo defender lo que estoy defendiendo, porque es parte de mi vida y de mi historia”, agregó.
Sobre cómo volvió a encontrar la motivación para comprometerse a grabar un álbum de estudio, comentó que fue a raíz de colaborar con Yandel en la canción Mira (2018), compuesta también por Juan Miguel.
“Yo grabé un tema con Yandel, a los tres meses tuve el accidente y me fracturé una pierna. Hice buen clic con ese muchachito, conecté y me motivé con él a grabar el disco nuevo. Yo sentía que no tenía algo nuevo que me hiciera disfrutar y desarrollar esa hambre y ese deseo que tenía a los 20 años. Eso me motivó, un muchachito joven, con buenas ideas, música refrescante y bailable”, recordó.
Con 11 canciones, el nuevo álbum titulado Llegué yo, que aún no ve la luz, no incluye colaboraciones porque marca el regreso de Jerry Rivera a los estudios de grabación.
“Había grabado algunos sencillos esporádicamente. Entonces tengo colaboraciones, pero decidí no incluirlas para hacer el regreso solo, porque estoy haciendo un regreso discográfico. Y después más adelante tendré las colaboraciones”, anticipó.
Una de las colaboraciones recientes es Coqueta, que grabó con su hijo, Moa, y Elvis Crespo.
“Es un tema colombiano. Fue idea de Elvis; me dijo que quería grabarlo con Moa y conmigo. Y a la gente le ha encantado, es bastante peculiar lo que se ha logrado con esto. Moa está agradecidísimo porque es fan de Elvis Crespo. Ha sido un éxito, no solo en YouTube, también en las plataformas”, contó Rivera.
Asimismo, reveló que su hijo quiere seguir sus pasos en el género, pero también se inspira en otros sonidos, al igual que él en sus inicios cuando se inspiraba en baladistas.
“Moa sí está en lo de la salsa, pero él tiene una idea muy diferente, un crucigrama de la salsa muy diferente al mío, ya que él tiene influencias de la música en inglés, americana. Y él la fusiona con la salsa, es una idea bastante diferente. Como yo que entré en la salsa trayendo influencias de la balada de Luis Miguel, de José José, él trae una influencia de otra música, pero sí en la salsa”, expuso.
“Ha sido una experiencia increíble, emocionante y bien significativa. Ver a mi hijo desarrollarse como artista y tener la oportunidad de compartir el estudio con él, es algo que no tiene precio. Me llena de orgullo. Hay una conexión especial cuando uno comparte la pasión por la música con alguien que amas tanto. Y trabajar juntos me ha permitido conocerlo más a fondo como profesional, no solo como hijo”, agregó sobre cómo ha sido trabajar con su retoño.
Asimismo, reveló que Moa quiere seguir sus pasos en el género, pero también se inspira en otros sonidos, al igual que él en sus inicios cuando se inspiraba en baladistas.
“Moa sí está en lo de la salsa, pero él tiene una idea muy diferente, un crucigrama de la salsa muy diferente al mío, ya que él tiene influencias de la música en inglés, americana. Y él la fusiona con la salsa, es una idea bastante diferente. Como yo que entré en la salsa trayendo influencias de la balada de Luis Miguel, de José José, él trae una influencia de otra música, pero sí en la salsa”, expuso.
“Le he dicho que sea auténtico, que no trate de copiar a nadie. Que la música se siente, no se fuerza. También le he recalcado que debe tener paciencia, porque esta industria es de resistencia, no de velocidad. Y en la vida, siempre le he dicho, que sea humilde, que valore a las personas y que nunca pierda su esencia ni su fe”, mencionó algunos de los consejos que le da a Moa.
El artista, que se describe como un padre “presente y protector”, reflexionó sobre la paternidad.
“Con él he aprendido a ver la música desde otra perspectiva, más fresca, más conectada con la nueva generación. Él tiene una manera distinta de crear y expresarse y eso me ha inspirado a seguir evolucionando. También me ha enseñado a soltar un poco el control, a confiar más y a disfrutar el proceso. A veces uno piensa que por ser padre tiene todas las respuestas, pero los hijos también tienen mucho que enseñarnos”, expresó.
“Siempre he tratado de estar ahí para mis hijos, no solo como figura paterna, sino como guía, como amigo y como apoyo emocional. Trato de enseñarles valores, responsabilidad y, sobre todo, el amor por la familia”.
Al ser consultado sobre si volvería a escoger hoy la salsa romántica, contestó:
“Sí, definitivamente. No fue una casualidad lo que se hizo, fue bien pensado. Lo que yo no tenía bien claro era si el primer disco iba a ser completamente de salsa, porque yo tenía la intención de grabar otros géneros, un tango, un vals, una balada, un bolero, porque mi papá, como cantante de música de trío en los hoteles que trabajaba, cantaba de todo tipo de música”.
“Ese era el concepto mío para una grabación de un disco, grabar de todo un poco, pero me dijeron que debía tener un concepto claro. Entonces la compañía me sugirió grabar un disco dirigido a la salsa. Yo entendí que era una edición correcta y que más adelante llegaría el momento de grabar otras cosas, con la fortuna de que funcionó muy bien”.
Aunque Rivera reconoce que es difícil predecir si una canción logrará o no trascender en el tiempo, asegura que la clave del éxito está en las buenas letras.
“Nunca sabemos si un tema va a durar para siempre, pero lo que sí puedo decir es que las canciones que han quedado, en el caso de canciones mías o de otros artistas, tienen que ser canciones que vengan del alma. No puede ser cualquier bobería que hable de un tópico específico con un lenguaje que esté de moda. Tiene que ser algo que no puedas identificar de dónde es, ni de qué época es, que tenga intelecto y simpleza a la vez, pero, sobre todo, que tenga respeto y valores. Lo que no es así, no dura”.