Pat Riley, presidente del Heat de Miami, señaló que, a pesar de que el equipo tenía la mira en varios peces gordos del mercado, el precio era demasiado elevado
El presidente del Heat de Miami, Pat Riley, hace un gesto mientras habla durante una conferencia de prensa de final de temporada de baloncesto de la NBA, el martes 20 de junio de 2023, en Miami.
AP Foto/Wilfredo LeeEl Heat de Miami estuvo a punto de hacer un cambio drástico en su plantilla durante la actual temporada muerta, luego de que estuvieran involucraos en rumores de canje por piezas de peso como Damian Lillard, Jrue Holiday y Bradley Beal. Sin embargo, al final, la directiva del equipo del sur de la Florida consideró que el precio solicitado era demasiado elevado y siguió adelante.
Antes del arranque de la campaña el miércoles, el presidente de Miami, Pat Riley, ofreció mayores detalles sobre lo que llevó al alto mando del combinado a alejarse de movimientos mediáticos durante los últimos meses.
"Estuvimos renuentes este verano a entregar a todas nuestras piezas en cualquier tipo de discusión con cualquiera", indicó Riley, en declaraciones para el Miami Herald. "Y al final decidimos hacerlo. Dijimos que batallaríamos esta temporada con Jimmy Butler y luego tomaríamos algunas decisiones desde ese punto de partida. Ha estado con Tyler (Herro) y Bam (Adebayo) rumbo a su quinto año. Así que allí es donde está mi pensar y creo que es el mismo lugar en el que se encuentra Erik Spoelstra (entrenador) también", agregó.
De igual forma, no deja de ser sorpresivo el hecho de que los más recientes subcampeones de la NBA no hayan realizado un movimiento de peso, en especial considerando que Lillard solicitó cambio directamente hacia el Heat cuando todavía se encontraba con los Trail Blazers. Al final, cuando las conversaciones entre Miami y Portland se cayeron, el estelar terminó empacando sus cosas para mudarse a Milwaukee.
Riley no ofreció detalles sobre qué podría seguir para el Heat, pues si bien saldrán como uno de los favoritos a disputar el título nuevamente este año, la ventana de triunfos pareciera cerrarse cada vez más para esta generación.
"Estamos en el quinto año. Jimmy está ansioso y nosotros también. Pero llegas a un punto en el que te preguntas si ya se hizo lo que se iba a hacer. No Jimmy, ¿pero el equipo ya hizo lo que iba a hacer?", concluyó Riley.
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