MIAMI.- El controvertido proyecto de ley 1105 (HB 1105), que busca prohibir el uso de teléfonos móviles en las escuelas de Florida durante toda la jornada de clases, fue enviado el viernes a la oficina del gobernador Ron DeSantis para su consideración.
La legislación, aprobada por la Cámara de Representantes y el Senado tras un extenso proceso legislativo, podría transformar drásticamente la forma en que los estudiantes interactúan y aprenden en las escuelas del estado.
El proyecto de ley, que entraría en vigor el 1 de julio de 2025 si es promulgado, establece una prohibición completa, "de campana a campana", del uso de dispositivos de comunicación inalámbrica para estudiantes de primaria y secundaria (K-8) durante toda la jornada escolar.
Qué plantea la ley
Para las escuelas secundarias, la HB 1105 propone un programa piloto en seis condados seleccionados por el Departamento de Educación de Florida. Actualmente, otra ley estatal ya prohíbe de manera parcial el uso de teléfonos durante el horario lectivo para escuelas primarias y secundarias.
La representante Demi Busatta, principal defensora de la propuesta, argumenta que la prohibición "de campana a campana" ayudará a mejorar la concentración académica de los estudiantes y reducir las distracciones en el aula, además de mitigar problemas de acoso escolar.
El proyecto de ley incluye excepciones para el uso de dispositivos electrónicos en casos de necesidades médicas, planes de educación individualizados (IEP) o planes de adaptación 504, así como notas médicas que justifiquen su uso por razones de salud.
Polémica
La potencial implementación de esta ley ha generado un intenso debate en la comunidad educativa y entre los padres. Si bien muchos aplauden la medida como una forma de mejorar el ambiente de aprendizaje y reducir las distracciones digitales, otros expresan preocupaciones sobre la seguridad y la comunicación en situaciones de emergencia.
Se espera que los distritos escolares enfrenten el desafío de desarrollar políticas claras y efectivas para hacer cumplir la prohibición, considerando las particularidades de cada institución y las necesidades de sus estudiantes.
Además de la logística de la implementación, existen interrogantes sobre el costo de garantizar el cumplimiento. Se ha planteado la posibilidad de utilizar soluciones como las bolsas de bloqueo de Yondr, pero su elevado precio podría representar una carga financiera considerable para los distritos escolares, especialmente aquellos con recursos limitados.
El sistema Yondr, propuesto como una posible solución para la aplicación de la prohibición de teléfonos móviles, consiste en bolsas especiales que bloquean los dispositivos al ser selladas magnéticamente. Los estudiantes conservan la bolsa con su teléfono, pero no pueden acceder a él hasta que se desactiva en una estación de desbloqueo designada.
La falta de una directriz clara sobre cómo los administradores deben hacer cumplir la ley podría generar tensiones, especialmente con los estudiantes de secundaria que son más independientes.
Expectativas
Florida estableció un precedente nacional en 2023 con la aprobación de la ley HB 379, convirtiéndose en el primer estado en regular formalmente el uso de teléfonos celulares en instituciones educativas. Desde que Florida dio este paso, más de la mitad de los estados estadounidenses han adoptado normativas similares.
Ahora el futuro de la HB 1105 está en manos del gobernador DeSantis. Su decisión podría tener un impacto significativo en las escuelas de Florida y podría servir como un modelo para otros estados que consideran medidas similares.
La comunidad educativa y los padres aguardan con expectación el paso que debe dar DeSantis, conscientes de que la ley, de ser promulgada, representaría un cambio fundamental en la forma en que los estudiantes interactúan con la tecnología en el aula.