","Ahora Claudio González, la voz y la imagen de Kendall Toyota, vive una temporada de vacas gordas. Pero no se deja desbordar por el éxito, sabe que hoy"podés estar arriba y mañana abajo" y, como él lo dice con propiedad,"la vida es como un tren, uno sabe cuándo se sube pero no cuándo se baja y, además, no es fácil ser argentino: mirá, Dios tardó 2013 años en encontrar un argentino humilde y lo volvió Papa".
","Suelta una carcajada como para que queda claro que no se toma muy en serio aunque sí pone sus manos al fuego por uno de sus principios básicos de comunicador:"Uno tiene que meterse en la cabeza que lo importante es la gente, que confíe y esté contenta. Si uno no la cuida, o la subestima, nada funciona".
","Y bajo esa idea, a la que le ha dado vueltas desde que empezó a vender carros en Argentina, ha guiado los últimos 10 años de trabajo arduo a través de las diversas campañas publicitarias de Kendall Toyota, en las que su único hijo, Michael, fue protagonista .
","Claudio Toyota
",""En lugar de Claudio, me llaman Toyota", revela este hombre que ha logrado la difícil simbiosis entre una marca tan fuerte de automóviles y él mismo, con sus propios rasgos de personalidad y sus ideas.
"," Es una estrategia de mercadeo que va más allá de los principios clásicos, y se guía más bien por la intuición de un hombre que resume su método en una sola frase:"hago lo que siento, la vida no es sólo vender, hay que abrir los ojos, ver que hay gente que está mal y necesita ayuda".
","Ahí radica la potencia de su mensaje, porque ha sabido marcar la diferencia con las otras empresas que se dedican al negocio de vender carros. Gracias a él los peruanos, damnificados de un terremoto devastador, recibieron un contenedor con alimentos y ropa; los haitianos, víctimas también de un sismo asesino, tuvieron víveres y primeros auxilios y, en estos momentos, cuando en Venezuela hay una profundización de su conflicto social, decidió lanzar al aíre un comercial que ha impactado a la comunidad de ese país que trata de rehacer su vida en el sur de la Florida.
",""Cada vez que haya un problema social tenemos que estar ahí", explica y de verdad se emociona cuando recuerda que, apenas hace un par de días, cuando entró a un restaurante, seis venezolanos lo reconocieron, se pusieron de pie y empezaron a aplaudirlo."Esto no pasa por lo comercial, sino por el sentimiento".
","La libertad
"," González vivió"de lejos" el golpe de Estado en su país, en 1976, pero lo que sí le quedó como lección de esos momentos oscuros de Argentina es que"todos tenemos el derecho de ser libres". Y desde ese punto de partida, afirma de manera contundente que"no apruebo de ninguna manera la represión, estoy en contra de que maten chicos porque están matando el futuro".
","Al respecto saca a colación la frase de Sarmiento:"Las ideas no se matan".
",""Por eso yo te digo que el país [Venezuela] no puede aguantar. Es cuestión de tiempo, el gobierno este de [Maduro] tiene fecha de vencimiento", sentencia González, quien una vez más ha puesto a prueba, con éxito, su teoría de que el contacto con la gente es lo más importante.
","Los números, además, le han dado la razón. Pero siente todavía la intensa presión de ser el mejor, de estar metido en una competencia feroz."No sé qué pueda pasar en el próximo minuto, vio el día a día", dice con la experiencia que le da el haber llegado a Estados Unidos, en 1982, con 20 dólares en el bolsillo, de haberla pasado muy mal en esos años de carencia absoluta.
","Claudio González siente que debe comunicar su verdad que está atada a una marca. Ahí está su religión, sin tomársela muy a pecho, tanto que sabe, sin hacer mucho aspaviento, que Argentina no ganará el próximo Mundial y que ser hincha del Boca Juniors, hoy por hoy, es casi un"acto de fe".
