MIAMI.- Lo que prometía ser una mejora en su calidad de vida, se convirtió en una emergencia médica para el reconocido presentador de televisión Raúl de Molina, quien recientemente se sometió a una panniculectomía. A un mes de la cirugía, que le extrajo más de 15 libras de piel y grasa, De Molina sufrió una severa complicación que lo llevó al borde de la sepsis.
Todo comenzó días después de la intervención, cuando el presentador perdió el conocimiento en su hogar de Miami. Relató que lo último que recuerda es cuando despertó y ve a su hija llamando al 911. La situación era crítica, había sufrido una importante pérdida de sangre, lo que requirió una transfusión de emergencia.
La gravedad del caso se intensificó cuando los médicos detectaron el riesgo inminente de sepsis sanguínea. Esto obligó a una segunda operación, esta vez de emergencia, para contener la infección. "Mía quedó un poco traumatizada", compartió el cubano, quien permaneció hospitalizado durante tres días mientras se recuperaba de esta inesperada crisis.
La cirugía inicial
La cirugía inicial, una panniculectomía, es un procedimiento para remover el exceso de piel y grasa del abdomen inferior, común en pacientes con pérdida de peso significativa. En el caso de De Molina, quien había perdido 110 libras a lo largo de los años, la operación le retiró 15.4 libras de tejido, buscando mejorar su movilidad y calidad de vida. "No podía nadar, no podía hacer ejercicio. Me molestaba mucho", explicó sobre sus motivaciones.
Sin embargo, la complicación surgió cuando, diez días después de su cirugía, De Molina decidió reanudar parte de su rutina de ejercicios. "Empecé a caminar como 2.1 millas... y después del octavo día, me empezó a doler el pie izquierdo", detalló.
Siguiendo el consejo de un médico que no era su cirujano plástico, comenzó a tomar pastillas desinflamatorias, una decisión que, según él, lo llevó a la crisis actual.
Con el apoyo incondicional de su esposa Millie, su hija Mía, y la supervisión de sus médicos de cabecera, incluyendo al Dr. Juan Rivera, Raúl de Molina se encuentra ahora en fase de recuperación. Aunque lleva veinte días sin poder salir, espera regresar a su trabajo la muy pronto.