ROMA.- Roma retirará con toda probabilidad su candidatura para los Juegos Olímpicos de 2024, ya que la alcaldesa, Virginia Raggi, dijo este miércoles en la capital italiana que no apoya el proyecto.
"Es irresponsable decir sí a esta candidatura", explicó. "Los Juegos Olímpicos son un sueño que en un cierto momento se convierte en una pesadilla".
El Comité Olímpico Italiano (CONI) aseguró que necesitaba tiempo para aclarar su posición, aunque previamente el presidente Giovanni Malago ya había advertido de que sin el consentimiento de la ciudad no habría una candidatura.
Un encuentro entre Raggi y los representantes del CONI programado para este miércoles finalmente se canceló.
"No vamos a asumir una nueva hipoteca para el futuro de Roma y de Italia" "No vamos a asumir una nueva hipoteca para el futuro de Roma y de Italia", dijo la alcaldesa, que criticó que los costos para los Juegos Olímpicos son siempre mucho más altos de lo presupuestado incialmente.
Para la política del "Movimiento 5 estrellas", el evento es sinónimo de deudas y, posteriormente, deja instalaciones deportivas sin uso en la ciudad. "Es un buen negocio para el lobby, sólo deudas para la ciudadanía", afirmó.
La decisión supone previsiblemente la segunda retirada de Roma en poco tiempo, después de declinar la postulación para los Juegos Olímpicos de 2020 debido a la crisis financiera.
Para el Comité Olímpico Internacional (COI), el adiós italiano es un nuevo golpe. Los ciudadanos de Hamburgo votaron el año pasado en contra de la postulación de su ciudad, mientras que Boston también retiró su candidatura y fue sustituida por Los Ángeles.
"Nuestra posición no es aislada. Otros ya hicieron lo mismo", advirtió Raggi.
En la pugna por los Juegos de invierno de 2022, Múnich, Graubünden, Estocolmo y Oslo también desistieron con antelación.
Los opositores a los Juegos acusan de desmesura al COI, cuya imagen se vio dañada por los Juegos invernales de Sochi 2014, que tuvieron unos costos de 51.000 millones de dólares.
Los altos costos y la mala situación financiera de Roma son los argumentos esgrimidos por Raggi, que ya en la campaña electoral en junio expresó su oposición al evento.
"Tendríamos que asumir nuevas deudas, eso no es sostenible", advirtió la alcaldesa.
Roma fue anfitriona de los Juegos de verano en 1960, mientras que otras dos ciudades italianas acogieron los de invierno, Cortina d'Ampezzo en 1956 y Turín en 2006.
En cuanto a los candidatos restantes, Los Ángeles sigue hasta ahora según el plan, sin protestas ni críticas significativas. En París, las encuestas muestran también una clara mayoría en favor de la organización del evento, además de que en el terreno político la mayoría apoya el proyecto.
En Hungría podría celebrarse aún teóricamente un referéndum, aunque de todas formas las opciones de victoria en la votación de Lima en 2017 que se le conceden a Budapest son mínimas.
FUENTE: dpa
