Por ADOLFO FRANCO
Analista Republicano
Por ADOLFO FRANCO
Analista Republicano
Conozco al juez Brett Kavanaugh desde hace muchos años, cuando servíamos juntos en la administración de George W. Bush. En aquel entonces, sabía que él estaba destinado a grandes cosas, por lo que no tengo dudas que será un excelente juez en la Corte Suprema de Justicia de los EEUU.
El juez Kavanaugh ha servido a nuestro país con distinción, incluso como empleado del juez retirado Anthony Kennedy. Luego pasó a trabajar con gran profesionalismo y dedicación como miembro de la Oficina de Asesoramiento Independiente durante la administración Clinton. Desde sus comienzos, Kavanaugh se ha dedicado a dos cosas: a defender el derecho de estado y a llevarlo a cabo sin temores o favoritismos.
Mi amigo, el juez Kavanaugh, ha estado comprometido activamente con nuestra comunidad desde hace mucho tiempo. Él se ha involucrado en algunos de los casos más importantes para el derecho constitucional a lo largo de su carrera. Por ejemplo, en el año 2000, representó de manera pro bono a los familiares (residentes en Miami) del niño refugiado político Elián González. El juez Kavanaugh, continúa luchando por nuestros derechos constitucionales, y es un amigo leal de nuestra comunidad hispana, demostrando en múltiples ocasiones su compromiso de abogar por las contribuciones de diversas comunidades a nuestro sistema judicial.
Muchos de sus empleados provienen de comunidades minoritarias. Es por esta dedicación para empoderar a los mejores y más brillantes de nuestra comunidad legal, que Latino Coalition endorsó su nominación a la corte más prestigiosa del mundo. Cuando apenas tenía 35 años, tuvo el honor de servir a nuestra nación en la Casa Blanca durante la administración del expresidente George W. Bush.
Después de demostrar un intelecto singular con conocimiento de la ley, el presidente Bush nominó a Kavanaugh para servir en la Corte de Apelaciones de los Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia. Desde aquel entonces, yo comencé a llamar a mi amigo “juez".
El honorable Kavanaugh ha probado durante más de 12 años ser un jurista imparcial que nunca ha inyectado política partidista en sus decisiones. La comunidad hispana se enorgullece de su dedicación a la vida familiar y la libertad religiosa. El juez Kavanaugh encarna esos mismos valores, que son tan queridos por los latinos.
Como abogado hispanoamericano, sé con convicción que el juez Kavanaugh preservará, protegerá y defenderá la Constitución de los Estados Unidos interpretándola tal y como está escrita. Él defenderá los valores de todos los estadounidenses con imparcialidad, reconociendo lo que hace a los Estados Unidos único: igualdad ante la ley y justicia para todos.
El próximo juez de la Corte Suprema de Justicia, Kavanaugh, emitirá decisiones judiciales basadas en un principio simple: conocer la diferencia entre lo correcto y lo incorrecto. Él evaluará los hechos de un caso y será fiel a la Constitución de los Estados Unidos. No tengo dudas de que mi amigo servirá a todos los estadounidenses y trabajará para garantizar que los principios de vida y libertad continúen guiándonos como nación.