Luego de trece años de ausencia de los cuadriláteros, el excampeón mundial de boxeo Oscar de la Hoya ya tiene todo listo para volver e intentar recuperar sus espacios y volver a convertirse en uno de los mejores peleadores del mundo. Para este 11 de septiembre, en el Staples Center de Los Ángeles, se tiene previsto que el pugilista se enfrente a Vitor Belfort, quien fue campeón de artes marciales.
Sin embargo, antes de dar el paso de volver a su mundo deportivo y hacerse nuevamente con sus guantes de oro, Oscar de la Hoya decidió que era el momento de dar a conocer una verdad muy personal que lo había atormentado por años y con ello deshacerse de sus demonios.
Se trata de situaciones que vivió cuando era un niño las cuales el boxeador, que actualmente tiene 48 años de edad, aseguró que le ocasionaron traumas y que le afectaron su estabilidad emocional por años, por lo que actualmente no está dispuesto a seguir viviendo esa situación interna y ha decidido liberarse.
Según reporta el diario Los Ángeles Times, Oscar de la Hoya reveló que sufrió abuso sexual en su infancia."Fui violado a los 13 años, por una mujer, una mujer más vieja", contó. "A los trece, perdí mi virginidad, sabes, violado básicamente. Estaba en Hawai, creo que en algún torneo. Ella tenía 35 años", detalló el boxeador.
Según el reporte, para Oscar de la Hoya aún no es sencillo hablar del abuso sexual del que fue víctima, de hecho es algo que le resulta incómodo al tratarse de una situación que lo lo marcó de por vida, tanto, que se refugió en los excesos y en adicciones al alcohol.
"Lo reprimes todo. Vives esta vida, el Niño de Oro, pero... ¡Oh, mierda, espera, aún está ahí!", expresó. "Nunca pensé en ello, nunca lo procesé, nunca pensé realmente cómo estaban mis sentimientos… Hasta que un día simplemente sale y no sabes cómo lidiar con ello", dijo Oscar de la Hoya al admitir que en el cuadrilátero drenaba todos sus traumas infantiles y lo utilizaba como una distracción.
Además del abuso sexual, el boxeador también confesó que hubo situaciones en su infancia, como una complicada relación con su madre, la cual murió tras padecer cáncer. En ese sentido, confesó que el año pasado experimentó con hongos psicodélicos, lo cual lo ayudó a reconciliarse con la relación que tuvo con su madre.
"Fue increíble. Fue en mi casa. Con un chamán", dijo. "El hecho de que un chamán llegó a mi vida en ese preciso momento, en ese lugar, pasó por alguna razón. Siento que me salvó. Pero me salvó solamente de mi mamá y de mi relación con ella", apuntó Oscar de la Hoya.
FUENTE: Con información de varios medios.