Los sistemas de seguridad de las escuelas de Miami-Dade podrían ser revisados y corregidos para evitar hechos de violencia, según lo admitió este jueves en rueda de prensa el Departamento de la Policía Escolar del Condado.
Tras el suceso ocurrido este martes en la secundaria Miami Killian Senior High en el que un joven fue apuñalado por otra adolescente, los encargados de la seguridad escolar hicieron este análisis en busca de que hechos como este no se repitan.
Según ha trascendido, en el área de la cafetería de la escuela Miami Killian, Brih Rolle apuñaló a Deandre Johnson en el área de la cafetería, con un arma blanca que la joven cargaba en su bolsa escolar, causándole lesiones en un pulmón y una arteria a su víctima que permanece hospitalizado.
Durante la rueda de prensa de este jueves, el teniente Raúl Correa, portavoz de la Policía escolar dijo que revisarían “lo que ocurrió, a ver cómo podemos mejorar los niveles de seguridad”.
“El programa de detección de metales al azar ha sido muy exitoso, aseguró. No podemos decir cuántos muchachos han sido atrapados con armas pero sí les digo que se han revisado a miles de estudiantes”.
En relación a esta modalidad, indicó que se practica en distintas escuelas de manera aleatoria. Agentes de ambos sexos utilizan el scanner para revisar a cada estudiante en el aula designada y sus mochilas. En caso de detectarse algún tipo de arma, los oficiales proceden a trasladar al alumno a la estación más cercana para las averiguaciones.
El jefe del Departamento policial del distrito escolar,E, insistió en que las autoridades no colocarán los arcos detectores de metales en las entradas principales de los colegios pues “no quieren hacer de las escuelas unas prisiones”.
Destacó la importancia de la campaña “Si ves algo, di algo”, una manera de facilitar la comunicación entre la comunidad educativa para mantener informada a las autoridades policiales sobre cualquier inquietud.
Al respecto, Correa comentó que “si chequeamos a cada estudiante se demorarán dos o tres horas más para ingresar a los colegios, técnicamente no es algo que deba llevarse a cabo”.
“Los estudiantes van a las escuelas a recibir clases, no debemos crear un estado policiaco y eso pudiera crear un ambiente no conveniente” aseveró.
Reiteró en la necesidad de recibir información oportuna para prevenir cualquier alteración del orden.
Daysy González, jefa de la oficina de comunicaciones del Departamento de Policía Escolar del Condado de Miami-Dade, mencionó la ocurrencia de incidentes con personas armadas en los aeropuertos, pese a la instalación de elevados sistemas de seguridad.
“Un arco detector de metal no va a detener la intención de hacer algo malo, usarlo sería como crear una falsa sensación de seguridad […] hay distintos lugares por donde se pueden ingresar armas a las escuelas” afirmó.
El organismo escolar destacó que además del capital humano con preparación continua para este tipo de incidentes y el programa de detención al azar, el Departamento cuenta con cámaras de vigilancia que pueden ser controladas a distancia.
Sin embargo, las autoridades reiteraron en la importancia de involucrarse con las comunidades, para conocer los problemas que padecen y profundizar en lo que ocurre dentro de las familias.
