MIAMI.- JOSÉ PERNALETE/ DLA
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@jpernalete
El joven Wisem Torbay cuenta con apenas 16 años de edad y permanece en una silla de ruedas tras ser atacado por colectivos armados en mayo de 2014. En rueda de prensa realizada en El Arepazo 2 de Doral, declaró que estaba manifestando contra el régimen de Nicolás Maduro en las calles junto a otros amigos y resultó baleado delante de efectivos militares y policiales que los mantenían acorralados.
“En Venezuela protestar es un delito y por eso recibí un disparo en la columna […] ellos creen que con eso nos intimidarán y los jóvenes no tenemos miedo” explicó.
El muchacho relató que “nos tenían trancados en una calle y estaban reprimiéndonos desde temprano […] de pronto estos funcionarios dejaron de disparar y los colectivos comenzaron a accionar sus armas calibre nueve milímetros”.
En ese momento fue cuando recibió un impacto de bala que luego de dañar su columna, un pulmón y algunas arterias, quedó alojado en su omóplato. “Mis compañeros me protegieron para que no resultara de nuevo herido porque esa gente seguía disparando” apuntó.
Ahora, luego de casi 10 meses, Wisem Torbay y su familia viajaron a Estados Unidos para recibir atención médica especializada. “Vine a este país porque en Venezuela no existen los recursos para atenderme” comentó.
Por su parte, Rosalina Valenzuela, madre del joven dijo que “los deseos de superación de mi hijo son fuente de inspiración […] recordar lo que le pasó me hace sentir impotencia, dolor y rabia”.
Esta familia venezolana coincide en mantener la lucha por el regreso de la libertad y el respeto a los derechos humanos.
La organización Programa Ayuda Humanitaria para Venezuela fue la encargada de facilitar el apoyo hacia el joven herido. Marisol Diéguez es una de las integrantes del organismo y afirmó que han contado con la participación de voluntarios en la nación suramericana y en EEUU para asistir en los insumos requeridos por el muchacho, ante la grave herida sufrida.
