WASHINGTON.- Michelle Obama durante taller de moda en la Casa Blanca, 2014. (AP)
WASHINGTON.- La primera dama estadounidense exhorta a estudiantes a luchar y alcanzar el éxito
WASHINGTON.- Michelle Obama durante taller de moda en la Casa Blanca, 2014. (AP)
EFE.
La primera dama, Michelle Obama, animó este miércoles a más de 150 estudiantes que quieren hacer carrera en el mundo de la moda a tener "una sólida educación y la voluntad de trabajar duro", durante un taller organizado en la Casa Blanca con diseñadores y otros profesionales del sector.
Las personas que triunfan no dejan que "sus miedos y dudas" les impidan realizar sus sueños, pero el camino hacia el éxito no es fácil y requiere estar preparado "para tomar riesgos y fracasar muchas veces", remarcó Obama.
"Quiero que sigáis trabajando duro y que sepáis que el fracaso es parte del crecimiento que necesitáis para ser grandes", enfatizó ante los estudiantes.
Los jóvenes, procedentes de institutos de Pensilvania, Nueva York, Maryland, Carolina del Norte, Virginia y Washington DC, fueron invitados a la Casa Blanca por su interés en desarrollar una carrera en el mundo de la moda.
La primera dama lució para la ocasión un vestido en azul oscuro diseñado por Natalya Koval, ganadora de un concurso organizado entre los estudiantes participantes.
Cuando se habla de la industria de la moda, se piensa casi únicamente que "todo son pasarelas y alfombras rojas", pero lo cierto es que la ropa que muestran las portadas de las revistas de moda es el final de "un proceso muy largo y muy complicado", señaló la primera dama.
Según detalló, durante el año pasado los estadounidenses gastaron más de 350.000 millones de dólares en ropa y calzado, y el sector emplea actualmente a unos 1,4 millones de trabajadores.
"La moda -dijo- es mucho más que un bonito par de zapatos de tacón o un buen dobladillo. Para muchas personas en todo el país es una carrera y el modo de dar de comer a sus familias".
La misión de este taller y de otros similares organizados en la Casa Blanca, agregó, "es siempre la misma: inspirar a los jóvenes como ustedes a soñar en grande y llegar más alto".
Como ejemplo de historias de éxito, la primera dama puso a Sara Blakely, quien, tras trabajar en Disney World y vender faxes, destinó todos sus ahorros (5.000 dólares) a montar la empresa Spanx, una firma de ropa interior que hoy llega a más de 50 países.
También mencionó a María Cornejo, quien, durante su infancia en Chile, cosía ropa para sus muñecas y emigró con su familia a Inglaterra como refugiada política.
Hoy Cornejo, que no hablaba "ni una palabra de inglés" cuando dejó Chile, tiene su propia compañía en Nueva York y "es una de mis diseñadoras favoritas", enfatizó la esposa del presidente Barack Obama.
Anna Wintour, editora de la revista Vogue en Estados Unidos y amiga de Michelle Obama, se encargó de presentar el discurso de la primera dama y elogió las campañas que encabeza para luchar contra la obesidad infantil (Let's move) y en favor de generar oportunidades para los veteranos de guerra.
"La educación es la clave para todo", insistió Wintour a los estudiantes, y además destacó, que la moda es una fuente de empleos y oportunidades en todo el mundo.
La editora sostuvo también que "la pasión es un poderoso instrumento para el cambio", y animó a los jóvenes a "sentirse bien" con ellos mismos antes que seguir "las últimas tendencias".
Los cinco talleres organizados estuvieron dedicados al trabajo en equipo; diseño técnico y creación de patrones; edición de blogs de moda y habilidades de escritura y comunicación; fusión entre tecnología y moda; y cómo aprender a ser un emprendedor.
Entre los diseñadores que participaron en los talleres, estaban Jason Wu, uno de los favoritos de la primera dama, Lela Rose y Zac Posen.