En la comunidad cubana existen ideas encontradas sobre las diferencias entre los primeros exiliados y quienes llegan de Cuba ahora
Acaba de publicarse, bajo el sello editorial de Aduana Vieja, Un pueblo disperso. Dimensiones sociales y culturales de la diáspora cubana, una selección de los trabajos presentados en la Novena Conferencia de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos, organizada por el Instituto de Investigaciones Cubanas (CRI, por sus siglas en inglés) de la Universidad Internacional de la Florida en mayo de 2013.
nJorge Duany, director del CRI y editor del volumen, aporta una excelente introducción u201cDel exilio histórico a la diáspora contemporánea u201d. Ante el reto de u201cdescribir e interpretar un desplazamiento poblacional tan extendido, complejo y diverso u201d, que ha resultado que en la actualidad un 16% de la población cubana viva fuera de la isla, Duany nos da una perspectiva histórica de los u201cemigrados u201d criollos que a partir de 1820 y hasta 1959 se asentaron en diversas u201ccolonias cubanas u201d, ya fuera por razones económicas o políticas.
nEl autor traza después el origen y las características de las primeras oleadas migratorias a partir del 1 de enero de 1959, o sea, ese exilio histórico en el que u201cpredominaron las personas con un trasfondo de clase media y alta, de origen europeo, creyentes en la religión católica y opositores al régimen de Fidel Castro u201d.
nActualmente, según Duany, la mayoría de esos cubanos u201cno ha claudicado en su oposición tenaz u201d al régimen cubano y no u201cha abandonado su ideología anticomunista u201d, ni su línea dura y oposición al embargo. n
Duany señala cómo los emigrados de la era postsoviética (es decir, los que han salido de Cuba después de 1990) tienen un perfil distinto, tanto por sus características socioeconómicas y raciales, como por sus actitudes y prácticas políticas. No todos se han asentado en Estados Unidos, y en su mayoría mantienen estrechos vínculos con sus familiares en la isla, a quienes envían dinero, y visitan con regularidad. No sostienen una actitud beligerante contra el régimen de La Habana. Presentan rasgos muy similares a las de otras diásporas transnacionales actuales. n
En la comunidad cubana existen ideas encontradas sobre las diferencias entre los primeros exiliados y quienes llegan de Cuba ahora. Creo que este ensayo introductorio de Duany, escrito con rigor académico y una prosa clara y precisa, ayudará a entender esas disimilitudes. n
En las páginas preliminares el autor también hace un breve resumen de las 26 ponencias que componen el volumen y que ahondan desde diversos ángulos en la larga historia de los cubanos que desde hace dos siglos se han visto obligados a vivir fuera de su país. Los textos, algunos en inglés y otros en español, tratan temas cubanos y cubanoamericanos relacionados con política, economía, literatura, música, religión, arte y el cine. También hay testimonios personales, como el de Gustavo Pérez-Firmat y el nuestro, presentados en un mismo panel, que muestran actitudes diferentes. n
Los tres primeros trabajos, el de Diana Álvarez Amell sobre la emigración en las novelas de Cirilo Villaverde; el de Arlene J. Díaz, sobre siete de los 15 años que vivió Martí en Nueva York; y las reflexiones de Yolanda Izquierdo Collar sobre lo que, en su sentido más amplio, significa el exilio, dan un basamento histórico y filosófico al resto del libro.
nLos autores representan distintas disciplinas y generaciones. Se incluyen aportes de académicos de renombre como Alejandro Portes, Ruth Behar, Eliana Rivero, Guillermo Grenier, Isabel Álvarez Borland, Flora González, Yolanda Izquierdo Collar y del musicógrafo Cristóbal Díaz- Ayala, entre otros.
nNo es menos valiosa la mirada fresca de profesores más jóvenes como Nora Gómez Torres, Aaron Puhrmann, Lori Celaya y Lucía M. Suárez. Hay más trabajos de mujeres que de hombres. Buena señal. La reconciliación y reconstrucción de un proyecto nacional necesitan urgentemente del aporte de la mujer, tan apta, por necesidad milenaria, en el arte de negociar. n
u201cPueblos dispersos u201d es una contribución valiosa a los estudios cubanos. Es asimismo un libro ameno, poliédrico por su variedad de temas y estilos, que podría llevar el mismo título del publicado hace años, Los cubanos pintados por sí mismos, aunque contiene también algunos trabajos de académicos de otras nacionalidades.
nNota: Un pueblo disperso. Dimensiones sociales y culturales de la diáspora cubana, Jorge Duany (ed.) puede obtenerse escribiendo [email protected] o a Eva Collado a [email protected]
*Miembro correspondiente de la Academia Norteamericana de la Lengua Española