MIAMI.- LAURA RIVERA
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Luis Tomé, fundador y director de una industria de papel del sur de Florida, Imex Paper; ha impulsado el comercio en la región, ampliando la oferta de empleo en la zona
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El empresario venezolano Luis Tomé fue premiado recientemente como el mejor exportador de Miami del año, un galardón que auspicia la Agencia Federal para el Desarrollo de la Pequeña Empresa de Estados Unidos (SBA, por sus siglas en inglés) y que lo posiciona como uno de los pocos hispanos destacados en este sector.
A simple vista, Tomé puede lucir como cualquier otro empresario enfocado en la producción de su compañía, pero este hombre no ha obtenido dicho premio por el simple hecho de generar ganancias.
La empresa que fundó y dirige hace 10 años ha sido una gran apuesta: es una de las pocas manufactureras del sur de la Florida –lo que demanda mayor inversión, riesgo y entrenamiento del personal-, y además, tiene una filosofía de trabajo que valora el capital humano, rompiendo con el esquema de grandes corporaciones del país dedicadas a producir al costo que sea.
En una visita a DIARIO LAS AMÉRICAS, el galardonado explicó cómo su firma Imex Paper; comercializadora internacional de papel, ha impulsado el comercio en la región, ampliando la oferta de empleo y aportando al desarrollo de la comunidad.
Con orgullo, el venezolano aseguró que no considera este premio como algo personal, pues no lo hubiera alcanzado sin el apoyo de su compañía. “Nosotros somos una gran familia, un equipo de trabajo. Ellos me han apoyado en las buenas y en las malas. Son muy buenos trabajadores, muy eficientes y bastante identificados con nuestro objetivo”.
Aprendizaje con la experiencia
“Hace 11 años estaba en Nueva York -recordó Tomé-, trabajaba en una compañía donde hacía lo mismo y comencé esta empresa desde cero prácticamente, sin mayores recursos. Y ha crecido bastante. Acabamos de inaugurar una planta convertidora y un centro de distribución en Medley, para distribuir nuestros productos desde aquí a Latinoamérica, pues antes lo hacíamos directamente desde la fábrica”.
Imex Paper recibe bobinas de papel -desde 42 fábricas diferentes de 12 países del mundo y cuatro continentes-, lo corta en hojas y lo distribuye a la mayoría de los países de América Latina y el Caribe para que ser utilizado en empaques de todo tipo.
El empresario destacó que las nuevas inversiones que hicieron son para prepararse al próximo gran cambio: “Creemos que se van a abrir muchas oportunidades con la nueva apertura del canal de Panamá. Esto va a permitir que los barcos que traen el papel desde Asia puedan llegar a nuestro puerto de Miami, dejen ese material aquí y desde aquí podremos distribuirlo hacia América Latina. Antes el proceso era otro”.
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La apertura del canal, prevista para finales de este año, va a ser muy significativa para Miami y Florida en general, según Tomé, “porque nos transformará en un centro de distribución, no solo del papel sino de muchísimos productos que lleguen desde Asia y el Pacífico hacia Latinoamérica”.
Filosofía de trabajo
Después de que lo botaran de una gran corporación productora de papel en la que había invertido dedicación y años de su vida, Luis Tomé comentó que se sintió un poco maltratado y fue entonces cuando decidió abrir su propio emprendimiento con otra filosofía de trabajo.
“Desde que la empresa se creó, hemos dado todos los beneficios a nuestros empleados. Inclusive en los tiempos difíciles, nunca les cortamos los beneficios. Escogemos bien al personal y trabajamos bastante pero no tenemos mucha gente. Preferimos tener menos, mejor pagada y con todos los beneficios, que tener más cantidad de gente y menos productiva”, explicó.
“En el ambiente corporativo americano, lo que pude ver es que a la gente aquí la tratan como un número más. Aunque una de las grandes ventajas económicas de EEUU es que existe la capacidad de contratar y despedir al personal con facilidad cuando la situación financiera cambia”, indicó el empresario.
“A mí me parece que el hecho de crear un personal que esté identificado con el negocio, que tenga valores alineados con los de la empresa y entrenar esa gente tiene un valor sumamente alto. Después las empresas los dejan ir de una manera muy rápida”, describió.
“Yo creo que cuando uno tiene trabajadores que están motivados tiene que hacer todo lo posible por mantenerlos porque en el largo plazo la inestabilidad de estar trayendo y sacando personal, tiene un costo mayor que el de mantener a la gente en un período que pudiese ser un poco difícil”.
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Tomé aseguró que esta política empresarial le ha funcionado y se enorgullece de que su firma se ha recuperado de la crisis pasada “sin tener que sacar a ningún empleado por el motivo económico”.
Papel sustentable
Aunque la gente tiene la impresión de que el papel está decayendo, sí lo está el destinado a la impresión y escritura (papel blanco de impresión), pero el papel de empaque está creciendo cada vez más a medida que crece el comercio con internet. El empaque se hace en cajas de cartón y papel.
Tomé comentó que ahora “hay un enfoque en la sustentabilidad del papel. Los papeles tienen unas certificaciones que dan constancia de que vienen de fuentes sustentables”, dijo. Los papeles que compra Imex vienen de lugares donde se vuelve a sembrar tras la tala de árboles.