miércoles 4  de  diciembre 2024
El vitiligo

Viviendo sin pigmentos

En Estados Unidos entre uno y dos millones de personas padecen esta enfermedad que afecta por igual a hombres y mujeres de todas las razas

El vitiligo es una enfermedad degenerativa de la piel, en la que, los melanocitos, células responsables de la pigmentación, mueren, dejando de producir melanina, sustancia que le da color a nuestra epidermis. n

En la mayoría de los casos, esta comienza entre los 10 y los 30 años de edad, y se manifiesta por la aparición de manchas blancas que, en principio, suelen ser circulares, con bordes definidos y con extensión variable, pero que con el tiempo, crecen y se extiende por todo el cuerpo.

Son más frecuentes en las extremidades; zonas de extensión y flexión, como las rodillas y codos; la cara; y los genitales. nNo se trata de una enfermedad contagiosa, y aunque no genera consecuencias graves, incrementa la susceptibilidad a las quemaduras solares en las zonas sin pigmentación y causa problemas estéticos que generan perturbaciones de orden psicológico. La prevalencia de esta afección está entre el 0,5 y el 3% de la población, sin diferenciar entre sexo o etnias. n

Una palidez más que blanca n

Este trastorno de pigmentación cutánea no es nada nuevo, pues la primera mención al respecto la encontramos en textos egipcios del 1.500 antes de Cristo; también en el Majábharata, texto épico religioso indio correspondiente al siglo III a. C., se hace referencia al rey Pandú, cuyo nombre obedecía a su extraña palidez, lo que se interpretó como una referencia al vitiligo. Así mismo, la Biblia describe ciertas dolencias cutáneas, empleando la palabra hebrea u201czara u2019at u201d, que se traduce como u201cmancha blanca u201d. n

La referencia histórica no termina ahí, pues el nombre vitiligo, derivado de latín, fue aparentemente acuñado por el enciclopedista romano Celsus en su libro de medicina, escrito en el siglo I después de Cristo, aunque ciertamente existen dos hipótesis sobre el origen de la palabra, la primera establece que esta viene de u201cvitium u201d, que se traduce como u201cdefecto u201d, y la segunda de u201cvitelius u201d, que quiere decir u201ccordero u201d y que al parecer alude al color blanco característico de los terneros.
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Pero más allá de la discusión etimológica, lo cierto es que no fue sino hasta finales del siglo XIX, que el dermatólogo húngaro Moritz Kaposi, famoso por descubrir el tumor de piel que hoy lleva su nombre, definió el vitiligo como una distrofia pigmentaria. n

Un origen desconocido n

Las causas de aparición del vitiligo aún generan enormes dudas, razón por la cual, los mecanismos que lo provocan siguen siendo objeto de estudio. Sin embargo, entre un 30 y un 40 % de los casos tienen un rasgo hereditario.
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Existen tres teorías que intentan explicar los posibles factores que desencadenan el vitiligo. La primera es la autoinmune, en la que se establece que el propio sistema inmune del paciente reconoce a los melanocitos como una amenaza y los elimina.

Le sigue la neurógena, según la cual, en las terminaciones nerviosas se libera alguna sustancia que es tóxica para las células que dan color a la piel. Y finalmente, la de la autodestrucción, cuyo postulado es que los melanocitos se destruyen a sí mismos. n
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 Tipos de vitiligo n

- No segmentario: las manchas se distribuyen con una clara simetría a ambos lados del cuerpo. n

- Generalizado: aparece en varias zonas corporales, próximas unas a otras, a menudo con una disposición simétrica en ambos lados del cuerpo. n

- Acrofacial: las lesiones aparecen en la región peribucal, es decir, alrededor de la boca; y en las extremidades. n

- Universal: las lesiones ocupan toda o prácticamente toda la superficie del cuerpo. n

- Focal: cuando se trata de una mancha única o de unas pocas localizaciones concretas. n

- Segmentario: una mancha única en una sola zona del cuerpo. Es la forma menos extendida, siendo la más común en niños y jóvenes.
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