MIAMI — Conforme a la decisión de la administración del presidente Donald Trump, las operaciones de Chevron en Venezuela deben cesar el martes 27 de mayo.
La ratificación del término de la licencia de Chevron el 27 es “un mensaje contundente” de EEUU hacia la administración de Maduro, según congresista María Elvira Salazar
MIAMI — Conforme a la decisión de la administración del presidente Donald Trump, las operaciones de Chevron en Venezuela deben cesar el martes 27 de mayo.
La ratificación de la medida fue anunciada por el secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, quien salió al paso a la versión de la agencia de noticias Bloomberg que apuntaban hacia una prórroga de 60 días.
“La licencia petrolera pro Maduro-Biden en Venezuela vencerá según lo programado el próximo martes 27 de mayo”, dijo Rubio el 21 de mayo a través de su cuenta en la red social X.
La Licencia General 41B, concedida en 2022, vencía inicialmente el 3 de abril pasado, pero hubo una extensión anunciada el 24 de marzo. En ese momento, la medida coincidió con el anuncio de Trump de fijar aranceles de 25% a países que compren gas o petróleo a Venezuela: fue el mismo día en que arribó a Caracas un vuelo con 199 migrantes deportados desde Estados Unidos.
Por su parte, Richard Grenell, enviado especial de Trump, negó las versiones periodísticas según las cuales se estaría negociando en silencio “un acuerdo de alto riesgo” para permitir que Chevron continúe con la exportación de crudo venezolano a Estados Unidos a cambio de que Venezuela acepte el regreso de miles de migrantes.
“Noticias falsas. Esta noticia no es cierta. No es periodismo”, indicó Grenell en su cuenta en X.
El 20 de mayo, Grenell se reunió con funcionarios de Nicolás Maduro en la isla de Antigua, donde se concretó la liberación del militar estadounidense Joe St. Clair, quien fue detenido en Venezuela en noviembre de 2024.
El miércoles 21 de mayo, John McNamara, encargado de negocios de Estados Unidos en Colombia, dijo que el Gobierno de Trump mantiene comunicaciones con la administración de Nicolás Maduro y la oposición venezolana que lidera María Corina Machado. Sin embargo, en entrevista con W Radio, enfatizó que EEUU “no reconoce al régimen” venezolano.
Tras conocerse la ratificación de la medida de Estados Unidos de cesar las operaciones de Chevron en Venezuela, la congresista republicana por el distrito 27 del sur de Florida, María Elvira Salazar, agradeció al secretario de estado Rubio “por hablar con la fuerza que exige el momento”.
Para Salazar, hacer negocios con Nicolás Maduro “es llenar los bolsillos de un narco-régimen criminal que reprime, encarcela, y que exporta terror a través del Tren de Aragua. Con esta noticia, Estados Unidos manda un mensaje contundente: Estamos con el pueblo venezolano y con la libertad. ¡Ni un dólar más para los tiranos!”.
Horacio Medina, presidente de la Junta Administradora ad hoc de Petróleos de Venezuela (PDVSA), en declaraciones a DIARIO LAS AMÉRICAS sostuvo que Chevron, con sede en Houston, logró aumentar la producción petrolera de una manera significativa.
Añadió que no cree que “PDVSA tenga la capacidad y el esfuerzo propio para poder mantener esa producción”.
Medina insiste entonces en el impacto de Chevron sobre volumen e ingreso: “Es la mejor empresa que ha estado produciendo”. El cálculo difundido en febrero de este año señala que la empresa aporta unos 200.000 barriles diarios (bd) de petróleo del millón de bd que produce Venezuela.
El experto petrolero agrega que Chevron se sabe de memoria lo que hay que hacer. “No creo que los chinos estén en capacidad de asumir de un día para otro la producción en la Faja Petrolífera. Los barriles que ha estado comercializando Chevron, los ha llevado al mercado premiun Estados Unidos luego de que PDVSA le entrega la titularidad. No es lo mismo negociar en los mercados oscuros de Asia que negociar en un mercado transparente en los Estados Unidos”, puntualiza.
La capacidad de expansión de la empresa estadounidense en Venezuela está restringida por las sanciones y sus operaciones limitadas a los contratos vigentes.
La economista Graciela Urdaneta, de la consultora Econalítica, asevera que las operaciones de Chevron y las otras empresas que operan bajo licencias representan cerca del 30% de la producción total actual.
“Además, han permitido el reingreso a los mercados más rentables como lo son Estados Unidos y Europa dado que a esos no debe venderse bajo descuento, pese a que hay una porción que se descuenta por deuda. Gracias a las licencias, Venezuela se encuentra actualmente como el cuarto proveedor de crudo para el mercado estadounidense, solo detrás de Canadá, México y Arabia Saudita”, indica.
Sostiene también que los envíos a EEUU y Europa representan poco menos de la mitad del total de exportaciones, algo positivo tanto a nivel de precio de venta como de logística.
“En el caso de Estados Unidos, estamos hablando de un comprador mucho más cercano geográficamente y que cuenta con refinerías adecuadas al tipo de crudo que produce Venezuela. Eso sin contar el flujo de divisas, que, según nuestras estimaciones, pudiera estar siendo alimentado por Chevron y las otras empresas entre 30 y 40%”, expresa.
Por su parte, el abogado Mariano de Alba, especialista en relaciones internacionales, señala que la salida de Chevron y otras petroleras occidentales genera el efecto de mayor participación de China sobre el mercado petrolero. Explica que esto último “representaría menor capacidad de influencia de Washington sobre Miraflores”.
Apunta que se está viendo “una negociación al detal” entre EEUU y Venezuela esto a partir de la reciente liberación del militar que estuvo como presión política. A su juicio, la tendencia de Trump empieza a acercarse más a la tesis de un entendimiento limitado con Maduro para algunos temas puntuales”.
En un artículo de opinión escrito para DIARIO LAS AMÉRICAS, publicado el 16 de mayo, el magistrado Miguel Ángel Martín indica que Chevron “ha adoptado una estrategia dual: presionar políticamente en Washington y mantener su infraestructura operativa en Venezuela”.
Añade que el CEO de la empresa, Mike Wirth, se ha reunido con funcionarios del Departamento de Estado y líderes del Congreso. Parte de sus argumentos son que un retiro definitivo impactaría la seguridad energética estadounidense “y entregaría la industria petrolera venezolana a actores rivales como China, Rusia o Irán”.
El 5 de mayo, Wirth señaló: "Somos la única empresa estadounidense que permanece sobre el terreno venezolano […] si nos fuéramos, como han hecho otros, la producción de petróleo continuará y las empresas de EEUU serán sustituidas por empresas de otros países, e históricamente han sido empresas chinas, rusas y otras que no son necesariamente del interés de EEUU ver en nuestro hemisferio".
FUENTE: Con información de Diario Las Américas, AFP, W Radio, CNN