Lima amaneció este martes con toque de queda, también algunas ciudades cercanas. Así lo dispuso el presidente de Perú, afín a la izquierda, Pedro Castillo.
¿Es la mejor solución que puede encontrar el mandatario para calmar a un pueblo molesto?
Rafael Gertin, abogado constitucionalista y profesor de la Universidad de Ciencias Aplicadas (UPC) en Perú, explicó a DIARIO LAS AMÉRICAS que la medida de Castillo es desproporcionada y estima que le hará perder mucho a la nación sudamericana. Además, adelanta que si no se toman las decisiones adecuadas, la situación podría empeorar.
“En el Perú existe mucho descontento por la deficiente gestión de Castillo. El toque de queda es una medida desproporcionada que restringe las libertades, haciendo perder al país millones de dólares por esta medida tan absurda”, valoró el jurista.
La decisión de Castillo -que tiene más del 66% de desaprobación del pueblo peruano, de acuerdo con varias encuestas- haría perder por día al país 1.500 millones de Soles (unos $405,350 millones), según reseñó el diario de Perú, El Comercio.
“Ante la crisis que parece ahondarse con estas medidas lo aconsejable para el presidente sería su dimisión y adelanto de elecciones generales. De no ser así la crisis podría agravarse”, agrega el constitucionalista.
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El presidente de Perú, Pedro Castillo (I), junto con el ministro de Educación, Rosendo Serna (D)
Europa Press
Molestia y desobediencia
Sin embargo, la desaprobación del presidente va a tal punto que algunos hicieron caso omiso a su decisión.
"Por acá no se ha visto tanto cambio. Negocios abriendo a mitad de puerta, pero abriendo. Trabajadores de construcción siguen con sus labores. Otros negocios, que venden almuerzos, atiende a puerta cerrada y hasta cierta hora, pero trabaja aceptando órdenes a través del teléfono. La frutería de la esquina, fui esta mañana y compré", asegura Andrés Espinoza, un venezolano que vive en Lima.
Pero la molestia del pueblo es evidente en las calles de Perú, donde un kilo de azúcar pasó de 2.50 soles hace una semana a 6 soles el pasado fin de semana. Además, tampoco aprueban cómo Castillo -que ha tenido que enfrentar mociones de destitución- escoge sus aliados.
La gestión de Castillo ha sido criticada debido a los constantes cambios del gabinete de su gobierno, en solo 8 meses a nombrado cuatro veces ese cuerpo del Ejecutivo, creando inestabilidad y una gestión mediocre que algunos expertos la califican de "incapacidad" para gobernar.
Castillo, un maestro rural, llegó al gobierno de la mano del izquierdista partido marxista leninista, Perú Libre.
"Luego de 8 meses de desgobierno, Castillo lejos de corregir sus errores y suplir su incapacidad para gobernar rodeándose de profesionales que lo puedan ayudar a gobernar, sigue rodeándose de funcionarios con serios antecedentes judiciales y además poco idóneos para ejercer cargos públicos", explica Rafael Gertin. "La ciudadanía está muy indignada por el alto costo de vida, la inseguridad ciudadana y la incapacidad del gobierno en dar solución a estos problemas. Todo comenzó con una huelga de transportistas de carga y de los agricultores que terminó estos últimos días con desmanes que se descontrolarnos totalmente".
