El periodista mexicano Fernando del Rincón calificó este jueves de acto “totalmente contrario a una conspiración” la postura asumida por él y su equipo de trabajo en la cadena de noticias CNN en relación con la investigación de la existencia de un presunto hijo del mandatario boliviano Evo Morales.
Sus declaraciones son una respuesta a las acusaciones que le hiciera Morales, quien presentó juicio contra el periodista por presunta conspiración en contra de su Gobierno, en alusión a una visita que realizó del Rincón a La Paz el 4 de mayo último para sostener un encuentro en un hotel con un menor que se hacía pasar por su tercer hijo, y retornar al día siguiente a Estados Unidos.
Durante la transmisión este jueves del espacio Conclusiones, que conduce del Rincón, se hizo referencia a la postura del gobernante boliviano quien acusó “a mí y a esta cadena, CNN, de haber supuestamente cometido delitos al estar investigando la existencia de un presunto hijo con la señora Zapata, con quien mantuvo una relación en el pasado, aceptada por el mismo presidente”.
“Como periodista tengo la obligación de cubrir las noticias y mantener informado al público”, dijo el presentador de CNN, quien explicó que efectivamente viajó a Bolivia en busca de elementos que certificaran o no la existencia del presunto hijo del mandatario.
Las alegaciones que se han levantado al respecto, confirmó del Rincón, “han sido objeto de coberturas por todos los medios noticiosos” y defendió el derecho de los medios de hacer “todo lo posible por asegurarnos de que la información que se esté divulgando es verídica”.
“Como se permite, se acostumbra y se tiene el derecho en cualquier país libre y democrático, ejercí mi función como periodista”, dijo y explicó que luego del viaje al país sudamericano, y tras un análisis de conjunto con el equipo con el que trabaja, reconocieron que no existían las evidencias suficientes para demostrar la presencia del presunto hijo de Morales, razón por la que decidieron no transmitir esa historia.
Del Rincón declaró como un acto “responsable, ético, vertical y profesional, totalmente contrario a una conspiración”, la decisión de no transmitir los hechos, y recalcó que la petición de entrevista al gobernante boliviano, solicitada durante la visita del periodista de CNN a Bolivia, hasta ahora sin respuesta, sigue en pie.
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