Una investigación de un grupo de científicos holandeses y austriacos encontró que el típico movimiento tiene como finalidad comunicarse y significa cosas diferentes según la forma de agitarla
Imágenes referenciales.
GIF / UnsplashMIAMI.- Los perros son los animales domésticos más extendidos en el mundo, con una población estimada de mil millones. Muchas personas piensan que cuando mueven la cola es porque están felices, pero la realidad es mucho más amplia y compleja.
Aunque se sabe que los perros domesticados usan sus colas para comunicarse tanto con otros perros como con humanos e incluso lo hacen con varios tipos de movimientos, aún no se descifran el modo y las explicaciones científicas detrás de ese acto.
Sin embargo, un reciente estudio realizado por expertos holandeses y austriacos del Instituto Max Planck de los Países Bajos identificó la verdadera razón por la cual los perros menean la cola más que otros animales y el control que tienen sobre ella.
La investigación publicada en un artículo de la revista Biology Letters, reveló que el típico movimiento tiene como finalidad comunicarse y significa cosas diferentes según la forma de agitarla.
La posición y el movimiento de la cola puede ser uno de los comportamientos animales más llamativos que los humanos pueden observar, a través del cual los canes emiten señales informativas fácilmente observables, que las personas pueden usar para observar el estado interno de los perros.
Los expertos señalaron que menear también significa cosas diferentes dependiendo de cómo se mueve la cola, su altura o su movimiento de lado a lado.
Por ejemplo, cuando la cola se mueve más hacia la derecha, normalmente significa que el perro está interesado en un estímulo o quiere acercarse a algo. Pero cuando se mueve más hacia la izquierda, indica incertidumbre o deseo de retirarse.
Mientras que cuando se mueve hacia abajo y cerca de las piernas, es un signo de sumisión o inseguridad. Los perros pueden interpretar y reaccionar de manera diferente a estos variados movimientos.
Entre las cosas importantes sobre este enigma que los científicos han logrado descubrir, es que a diferencia de otros animales, los perros lo hacen principalmente para comunicarse, en lugar de para la locomoción como las ballenas o para ahuyentar a los insectos como los caballos.
La mayoría de los científicos animales coinciden en que ese comportamiento es probablemente una forma de comunicación, un medio para expresar felicidad al ver a alguien a quien han echado de menos. Además es importante comprender la razón, para el bienestar animal y ayudar a los dueños a leer mejor las señales de sus compañeros de cuatro patas.
Para profundizar en este misterio científico, los investigadores examinaron más de 100 estudios previos para descubrir qué elementos del movimiento de la cola se comprenden y cuáles siguen siendo misteriosos.
Entre los estudios que examinaron hubo uno que más llamó su atención, este analizó más de 40 especies durante cuatro años y encontró que el perro doméstico era la especie que más meneaba la cola.
Además, formularon algunas hipótesis sobre los orígenes de este comportamiento, entre ellas que tal vez el movimiento de la cola aplaca alguna necesidad humana de ritmo, o tal vez sea un acompañamiento genético, un rasgo ligado a otros que los humanos criaron en perros domesticados.
Una de las ideas planteadas por los autores es que se debe al movimiento rítmico domesticado, que indica que el cerebro de los humanos responde positivamente al ritmo. Debido a que mover la cola es un comportamiento rítmico, los autores sugieren que podría ser que los humanos, consciente o inconscientemente, prefirieran los patrones rítmicos simétricos.
Otra de las hipótesis que presentaron es la del síndrome de domesticación, que a juicio de los científicos podría estar en juego. Esta teoría sostiene que pueden aparecer rasgos no deseados y genéticamente vinculados cuando se crean otros específicos mediante la domesticación.
Exponen que el comportamiento no apareció como un rasgo aislado, sino que fue un subproducto de la selección de otras características generales. Según los expertos, el ser humano domesticó a los perros más dóciles, por lo que quizás solo los mansos presentaron un gen de meneo de la cola.
“Quizás las características caninas que los humanos consideraban deseables para criar, como el temperamento, podrían estar genéticamente relacionadas con el movimiento de la cola”, enfatizaron.
Sobre cómo evolucionó el comportamiento, los investigadores señalaron que los lobos y los zorros mueven muy poco la cola; por tanto, parecería ser un rasgo que evolucionó durante el proceso de domesticación.
Otra de las incertidumbres es cuánto el movimiento de cola está bajo el control consciente de los perros. Varios estudios han observado que los perros mueven la cola más que otros caninos, particularmente en comparación con su pariente más cercano, el lobo, pero los científicos aún no saben por qué.
Destacaron que un enfoque multidisciplinario que combine la neurología, la cognición y la fisiología, sería útil en futuras investigaciones sobre este tema.
Finalmente, enfatizaron que estudiar el comportamiento de los perros y sus movimientos también podría revelar datos sobre la conducta humana, puesto que el proceso de domesticación también fue un proceso evolutivo, en el que participaron los humanos.
@Lydr05
FUENTE: Con información de la revista Biology Letters
Descarga LA APP