MIAMI.- El pelotero cubano José Abreu, de los Medias Blancas de Chicago, admitió este miércoles haberse comido la página de la fotografía de un pasaporte falso con el que viajaba de Haití durante la sesión del juicio que se sigue en Miami contra el agente de jugadores del béisbol de las Grandes Ligas, Bartolo Hernández, y el preparador físico Julio Estrada, por contrabando de personas.
Abreu explicó ante el jurado lo que sucedió en un viaje ilegal que formaba parte del recorrido que tenía que seguir bajo la coordinación de una red de contrabando de jugadores cubanos que deseaban llegar a las Grandes Ligas.
El toletero de los Medias Blancas, que milita en la Liga Americana, detalló que había pedido una cerveza en un vuelo de Air France de Haití a Miami, y lentamente se tragó la página que tenía un nombre falso y su foto.
El primera base cubano reconoció que viajó ilegalmente porque temió no cumplir con un plazo de octubre del 2013 y perder el contrato por 68 millones de dólares que después firmó con los Medias Blancas.
"Si no estaba allí ese día, en ese plazo, entonces el contrato no se concretaba y sería inválido", justificó Abreu. "Teníamos que estar en Chicago para firmar el contrato".
El testimonio forma parte del juicio que se sigue contra Hernández y Estrada, que están acusados de contrabando ilegal de personas.
Ambos presuntamente estaban a cargo de una organización que sacaba a peloteros de Cuba y los llevaba a terceros países, donde fijaban sus residencias para luego firmar lucrativos contratos como agentes libres.
Entre ellos se encontraba Abreu, elegido Novato del Año de la Liga Americana en 2014, y que accedió a testificar en el juicio tras recibir inmunidad limitada por su conducta ilegal, lo que significa que no será imputado si dice la verdad en el banquillo.
Otros peloteros cubanos también declararon, entre ellos Adeiny Hechavarría (Marlins de Miami) y Leonys Martín (Marineros de Seattle), que igualmente admitieron haber actuado de forma ilegal bajo la dirección de la red encargada de conseguir su llegada a Estados Unidos.
Abreu detalló a los miembros del jurado que obtuvo el pasaporte falso en Haití, a donde fue llevado con su familia al salir de Cuba en un bote en agosto de 2013.
El primera base de los Medias Blancas señaló que su contacto principal y ayudante allí era Amin Latouf, un hombre que fue imputado junto con Hernández y Estrada, pero que no ha sido arrestado.
El toletero cubano señaló que Latouff le consiguió el pasaporte y compró el boleto para el vuelo en Air France, e instruyó al jugador para que destruyera el documento una vez a bordo del avión.
Pero en vez de romperlo y lanzarlo a la basura, Abreu dijo que ordenó una cerveza Heineken y se comió la página en la que estaba la fotografía.
"Me tragué la primera página poco a poco. No podía llegar a Estados Unidos con un pasaporte falso" "Me tragué la primera página poco a poco. No podía llegar a Estados Unidos con un pasaporte falso", reconoció ante el jurado.
Una vez en Miami, la política migratoria de ese momento permitía a Abreu permanecer en Estados Unidos porque ya estaba en suelo estadounidense, aunque no tuviese documentos.
Esa política fue enmendada recientemente por el expresidente demócrata Barack Obama.
Abreu testificó que Hernández y sus socios negociaron su contrato con los Medias Blancas, y que Estrada se encargó de su preparación física, alojamientos y otras necesidades mientras estuvo en Haití y la República Dominicana.
La compañía de Estrada, Total Baseball, iba a recibir el 20 por ciento del contrato de Abreu, y Hernández el cinco por ciento.
Pero Abreu declaró que fue su idea conseguir el pasaporte falso en Haití, y pidió ayuda a Latouff.
"Me pareció que podía ayudarme con eso, y le confié ese secreto", admitió Abreu ante los miembros del jurado.
El juicio, que ya ha durado cerca de un mes, durará unas cuantas semanas adicionales.
Abreu, que la pasada temporada logró 25 jonrones y remolcó 100 carreras, recibió permiso de los Medias Blancas para ausentarse de los campos de entrenamiento en Arizona y viajar a Florida para testificar.
El toletero cubano antes de llegar a Miami para declarar en el juicio declaró que su objetivo era dejar atrás el episodio de su llegada a Estados Unidos y centrarse por completo en el juego de pelota de cara a la próxima temporada que comenzará en breve.
"No quiero que haya ningún tipo de distracción en mi juego", destacó Abreu. "Estaré listo al ciento por ciento para lograr que esta temporada el equipo pueda competir con los mejores".
FUENTE: EFE