Desde baños en el mar hasta imitaciones de McGregor, los Panthers tiraron la casa por la ventana en su desfile de campeón por Fort Lauderdale
Brad Marchand #63 de los Florida Panthers sostiene la Copa Stanley durante el Desfile y Rally de la Victoria de los Florida Panthers 2025, el 22 de junio de 2025, en la playa de Fort Lauderdale, Florida. Eliot J. Schechter/Getty Images/AFP (Foto de ELIOT J. SCHECHTER / GETTY IMAGES NORTH AMERICA / Getty Images vía AFP)
Eliot J. Schechter/Getty Images/AFPLos Florida Panthers saben cómo ganar... y también cómo celebrar. El domingo, Fort Lauderdale fue el epicentro de la euforia cuando el equipo campeón desfiló con su segunda Copa Stanley consecutiva, desatando una fiesta que dejó momentos inolvidables para sus fanáticos.
Desde temprano, los jugadores demostraron que este no era un desfile cualquiera: bajaron del autobús para acercarse a la gente y compartir la Stanley Cup con los fanáticos, generando escenas llenas de emoción, selfies, y abrazos entre campeones y seguidores.
Tkachuk repite baño, pero sin trofeo
El carismático Matthew Tkachuk, protagonista del título, no quiso romper la tradición y se metió al Océano Atlántico, tal como hizo el año pasado. Esta vez, sin embargo, le pidieron que no llevara el trofeo al agua, probablemente para evitar sustos como los vividos por otros campeones en celebraciones anteriores.
No faltó la clásica ducha de cerveza desde la propia Copa Stanley, cortesía de uno de los jugadores, para deleite de un aficionado afortunado. Y entre bromas, sonrisas y cerveza volando por los aires, también hubo muestras del buen humor del equipo.
Sam Bennett, elegido Conn Smythe Trophy al jugador más valioso de los playoffs, sorprendió al público con una imitación de Conor McGregor, lanzando un mensaje claro:
“No nos importa si nos llaman equipo sucio, ganamos igual”.
Nate Schmidt llevó la celebración a un plano más íntimo, compartiendo con su familia y demostrando que los desfiles también son para disfrutar con los seres queridos.
El entrenador Paul Maurice, por su parte, volvió a robarse el show con su característico micrófono, lanzando frases sobre sus "gatos" que arrancaron carcajadas y aplausos.
Con este segundo campeonato consecutivo, los Florida Panthers se consolidan como una dinastía moderna de la NHL, y la ciudad lo sabe. El desfile fue una verdadera fiesta en la que el hockey, el calor y la cultura local se mezclaron en una postal inolvidable.
¿Quién dijo que el hockey era solo para el norte?
Florida es campeón otra vez, y así lo celebró su gente.
Descarga LA APP
video
video