TUCSON (EEUU).- Cientos de adolescentes centroamericanas cruzan cada año embarazadas la frontera con México y acaban en albergues para menores indocumentados, de acuerdo a cifras del Gobierno federal, que ha abierto guarderías en estas instalaciones para cuidar de los más pequeños.
"No sabemos (con exactitud) cuáles son las razones por la que están llegando mujeres embarazadas a la frontera, son muchos factores socioeconómicos que afectan la inmigración indocumentada", manifestó a Efe Anna O'Leary, directora del Departamento de Estudios México Americanos de la Universidad de Arizona.
"Debemos tomar en cuenta el nivel de educación en sus países de origen, la educación siempre está relacionada con los niveles de natalidad entre los adolescentes", agregó la investigadora, quien por años ha estudiado la inmigración enfocándose principalmente en las mujeres.
Cuando los menores centroamericanos no acompañados son detenidos en la frontera sur, las autoridades los envían a albergues establecidos por el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), mientras se tramita la custodia legal con algún familiar que vive en el país y se define su estatus migratorio.
Luego de que la Patrulla Fronteriza entrega las menores indocumentadas el HHS tiene como parte del protocolo de ingreso una revisión médica, en caso de encontrar a la menor embarazada ésta recibe el cuidado que requiere mientras dura su estancia en los albergues.
El HHS cuenta con aproximadamente 100 albergues en 12 estados a través del país, incluyendo los estados fronterizos de Texas, Arizona y Nuevo México.
El pasado mes de mayo, Efe tuvo la oportunidad de visitar uno de estos albergues en la ciudad de Phoenix, Arizona, que cuenta con una guardería dentro de sus instalaciones donde se cuida a los bebés de algunas de las adolescentes centroamericanas mientras toman sus clases de inglés y matemáticas dentro del albergue.
En esa fecha, en la guardería había tres niños con meses de nacidos, los cuales al igual que sus madres reciben la atención médica y alimentación que requieren.
De acuerdo a cifras proporcionadas por el HHS al canal de televisión KFOX14 de Texas, en el 2014 hubo un total de 726 menores embarazadas que estuvieron bajo su custodia en albergues.
En el año fiscal 2015 la cifra fue de 456, mientras que durante el presente año 2016 se han reportado 367 casos, lo que representa un total de 1.549 casos en los últimos tres años.
La investigación del canal aclaró que algunas de estas adolescentes incluso están dando a luz en los albergues.
Las cifras oficiales facilitadas por HHS a KFOX14, indican que en el 2013 nacieron 50 bebés en los albergues, en el 2014 esta cifra se elevó a 53, mientras que para el 2015 y 2016 todavía no hay datos oficiales.
La mayoría de las menores indocumentadas no acompañadas provienen de países como Guatemala, Honduras y El Salvador.
Y según la ley, si un bebé nace dentro del territorio estadounidense, éste se convierte automáticamente en ciudadano del país.
El HHS ha reportado que entre las niñas centroamericanos que cruzan las fronteras hay menores embarazadas que tienen tan sólo 11 años de edad.
La investigación del canal incluso indicó que muchas de esta niñas son violadas a lo largo del camino, por eso llegan embarazadas.
"En algunos casos son niñas teniendo niños", dijo a Efe María R. Cartes, voluntaria del albergue "Alitas" para mujeres indocumentadas establecido por la red de Servicios Católicos en Tucson, Arizona.
El albergue que no tiene ninguna relación con HHS recibe a mujeres de todas las edades después que son liberadas por la Patrulla Fronteriza.
"La violencia y el hambre son las razones principales por las que estas mujeres deciden llevar a cabo este peligroso recorrido", indicó Cartes.
Confesó que las mujeres relatan horribles crímenes cometidos por las pandillas y el crimen organizado en sus poblaciones.
"Muchas de ellas fueron testigos del asesinato de sus familiares, y temen correr con la misma suerte por lo que de un día a otro deben dejarlo todo, tomar a sus hijos y escapar", detalló.
Agregó que algunas adolescentes incluso tratan de "ocultar" su embarazo al cruzar ya que creen que esto puede convertirse en un problema para ellas.
"Es muy triste lo que estamos viendo en la frontera, en general las mujeres tienen más riesgos de ser víctimas de violencia, asaltos o inclusive son violadas en el recorrido hacia la frontera", concluyó.
FUENTE: EFE