La familia del francotirador de Idaho, Wess Roley, quien mató a tiros a dos bomberos tras aparentemente atraerlos al bosque con un incendio forestal el domingo, ha roto el silencio, afirmando que "no comprenden" cómo ocurrió este atroz crimen.
"En este momento, nosotros, la familia de Wess Roley, queremos ofrecer nuestras más sinceras condolencias a las familias de aquellos cuyas vidas fueron arrebatadas y a la comunidad de Coeur d'Alene en general", declaró la familia de Roley a The Post
La familia del francotirador de Idaho, Wess Roley, quien mató a tiros a dos bomberos tras aparentemente atraerlos al bosque con un incendio forestal el domingo, ha roto el silencio, afirmando que "no comprenden" cómo ocurrió este atroz crimen.
"En este momento, nosotros, la familia de Wess Roley, queremos ofrecer nuestras más sinceras condolencias a las familias de aquellos cuyas vidas fueron arrebatadas y a la comunidad de Coeur d'Alene en general", declaró la familia de Roley a The Post en un comunicado emitido el lunes a través de su abogado Justin Whittenton.
"No hay palabras suficientes para describir esta tragedia y las infinitas pérdidas sufridas por los afectados por este tiroteo. No entendemos por qué sucedió esto ni cómo se produjo", continuaron.
“Estamos destrozados por las pérdidas y el dolor, y también por nuestra propia pérdida”, añadió la familia, explicando su intención de cooperar plenamente con los investigadores mientras “afrontan el dolor de esta atroz tragedia en nuestra propia familia”.
Roley, de 20 años, murió el domingo por una herida de bala autoinfligida tras atacar a los bomberos que acudían al incendio que él mismo provocó.
Unos 300 agentes del orden acudieron cuando Roley disparó contra la gente desde la sombra del bosque.
Su cuerpo fue encontrado tras un tiroteo que duró horas. El incendio que él mismo provocó continúa quemando más de 10 hectáreas, informaron las autoridades el lunes.
FUENTE: Con información de AFP.