MIAMI.- Durante el fin de semana, la comunidad nicaragüense del sur de la Florida conmemoró con misas, marchas y encuentros culturales el quinto aniversario de la Rebelión de Abril, que dejó en 2018 un saldo de muerte, exilio, represión y presidio político en la nación a manos de Daniel Ortega.
Tras la misa en la iglesia de Santa Ágatha —donde se refugia el obispo auxiliar de Managua, Silvio José Báez—, en Miami, partió una caravana de autos y otra de personas a pie rumbo al parque Rubén Darío, centro neurálgico de estas protestas de nicaragüenses de la diáspora que alcanzaron otros espacios en países como España, Costa Rica, Canadá y el propio EE UU con el propósito de continuar denunciando las violaciones de derechos humanos por parte del régimen, y demandar justicia, reparación y garantías de no repetición.
Al recordar a los 355 nicaragüenses asesinados durante las protestas de 2018, Báez abogó por la esperanza y la conciliación. “Hoy hacemos memoria de ellas (las víctimas) no para odiar y pedir venganza, ni para reproducir en nosotros los mecanismos criminales del opresor. Recordamos a las víctimas para orar por ellas y sus familias, para no repetir las injusticias del pasado y honrar su memoria exigiendo justicia y comprometiéndonos por el ideal por el que ofrendaron su vida”, dijo durante la homilía y más tarde reconoció ante la prensa que las protestas del 18 de abril de 2018 marcaron un hito histórico en Nicaragua que no debe ser olvidado, porque “se creó un tipo de convivencia que debe volverse un modelo para el futuro”.
En las afueras de la iglesia, se expusieron fotografías de las víctimas del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo y se les encendieron velas, en tanto activistas políticos, excarcelados, universitarios y defensores de derechos humanos cargaron cruces de madera y ondeaban la bandera de Nicaragua que mantienen una línea de lucha cívica.
Mileydi Castillo, una joven nicaragüense que reside en Miami, decidió unirse a su comunidad para protestar en honor de quienes, por culpa de la dictadura, no pueden hacerlo. Castillo dijo a DIARIO LAS AMÉRICAS que vino a la marcha para representar a sus coterráneos. "Estos muy orgullosa de ser nicaraguense", enfatizó la joven y remarcó: "¡Abril no se olvida!".
Por su parte, Jeffrey Jarquín enfatizó que él es un exiliado y uno de los jóvenes estudiantes que estuvieron encarcelados. "Queremos libertad, como la quieren los cubanos y los venezolanos, pero no va a haber libertad si no tenemos unidad".
Foro “5to Aniversario de la Rebelión Cívica de Abril”
Asimismo, el Doral Cultural Arts Center, ubicado en 8363 NW 53rd Street, acogió el foro “5to Aniversario de la Rebelión Cívica de Abril”, el sábado 15 de abril, desde las 10:00 a.m. Organizado por la Fundación para la Libertad de Nicaragua, en coordinación con la Ciudad del Doral, la Universidad Internacional de Florida (FIU), Ipades y The Center for Governance and Democracy, el evento contó con múltiples paneles, exposiciones e intervenciones de alto nivel con la participación de liderazgos representativos de la lucha por la democracia en Nicaragua.
A la vez, los organizadores la concibieron como una oportunidad de diálogo en función de fortalecer redes de trabajo en el marco de la lucha de Abril contra la dictadura en Nicaragua y debatir, en un marco más amplio, sobre las dictaduras en el hemisferio, el rol de las juventudes en la democracia, libertad de prensa, el caso de la Navidad Roja, y la situación de los presos políticos en Nicaragua.
Éxito de la jornada
"Felicitamos y respaldamos las múltiples expresiones de amor a Nicaragua, organizadas alrededor del mundo, ya que dentro de Nicaragua el aparato represivo de la dictadura impide toda manifestación pública en pro de la libertad", destacó Jonathan Duarte en nombre de la Fundación Para La Libertad de Nicaragua.