MIAMI. – Xavier Suárez, una de las figuras más emblemáticas de la política miamense, vuelve al ruedo electoral con una propuesta audaz: reconquistar la alcaldía de Miami, un cargo que no solo conoce bien, sino que ayudó a definir como el primer alcalde de origen cubano en la historia de la ciudad.
A sus 76 años, Suárez, quien gobernó la Capital del Sol entre 1985 y 1993, y brevemente de 1997 a 1998, se enfrenta a un campo electoral diverso y competitivo que incluye a personajes del ámbito político local y condal. Hasta el momento se encuentran registrados 11 aspirantes para esa posición.
La experiencia de Suárez como exalcalde y excomisionado del Condado Miami-Dade entre 2011 y 2020 lo posiciona como un candidato con un profundo conocimiento del andamiaje gubernamental. Sin embargo, la sombra de un antiguo rival se cierne sobre la contienda.
Aunque el comisionado municipal Joe Carollo no ha oficializado su candidatura, una posible participación del legislador del Distrito 3 reavivaría una de las rivalidades políticas antológicas de Miami. El enfrentamiento evocaría el polémico capítulo de 1998, cuando Suárez fue destituido de la alcaldía apenas meses después de haber ganado las elecciones de 1997, luego de que los tribunales anularan los resultados por un escándalo de fraude con boletas de voto ausente.
Pero, además, el intento de regreso al Ayuntamiento llega con un precedente electoral reciente. En 2020, Suárez compitió por la alcaldía del Condado de Miami-Dade, una contienda en la que finalizó en un distante cuarto lugar, muy por detrás de quienes pasaron a segunda vuelta, Esteban Bovo Jr. y Daniella Levine Cava.
En entrevista con DIARIO LAS AMÉRICAS, Suárez dejó claro que su principal motivación para volver es tangible y directa: el bolsillo de los residentes. Su propuesta central es una reforma radical del impuesto a la propiedad que eximiría del pago a todas las viviendas con un valor inferior a 575.000 dólares.
Su visión de gobierno también incluye la eliminación de peajes en autopistas y la expansión del transporte público gratuito, una gestión que, aseguró, iría más allá de los límites de la Ciudad e implicaría una necesaria reforma a nivel condal, con gestión estatal.
Con un tono enfático, lanzó una dura advertencia a sus detractores, tras asegurar que no tolerará difamaciones durante la contienda. "La primera difamación, yo pongo una demanda. Para eso soy abogado", sentenció.
- Tras una extensa trayectoria política en Miami y en el condado Miami-Dade, ¿qué lo motiva a intentar volver a la alcaldía de Miami?
Esa pregunta me la han hecho bastante y no sé si, en cierto sentido, se refieren a mi edad, pero tuve una experiencia en la alcaldía cuando no se tenía el poder de nombrar a un administrador ni de vetar las acciones de la Comisión, y el alcalde tenía muy poco poder, y ahora tendría la habilidad de completar una serie de proyectos muy importantes. Lo más importante sería llevar a la Legislatura una reforma del impuesto a la propiedad. La Ciudad de Miami ha aumentado el avalúo de las propiedades en un 140 % en menos de una década, y eso conlleva una obligación de reducir este gravamen en una proporción similar. La mejor manera de hacerlo sería a través de una iniciativa de la representante estatal Vicky López que estoy apoyando, una reforma que también respalda el presidente de la Cámara (en Tallahassee), Danny Pérez. Ese cambio dejaría exento del impuesto a la propiedad a cualquier casa o condominio cuyo valor sea inferior a 575.000 dólares. Esta reforma la apoya no solo la Legislatura, sino también el gobernador de Florida. Pero la ciudad de Miami ha tenido un auge increíble bajo el actual alcalde, algo que no se esperaba. Todo el mundo quiere mudarse para acá y eso significa mucha construcción. Eso conlleva un aumento en la empleomanía. El desempleo en la ciudad de Miami está en 1.8 % y es algo que los economistas no pensaban que pudiéramos alcanzar. Hay muchos restaurantes y clubes que están buscando empleados y no tienen cómo llenar las vacantes. El problema es el costo de vida, que no ha bajado y va en aumento. Por eso hay que buscar la manera de quitar todos los impuestos, incluidos los peajes en autopistas que fueron construidas hace 30 años. Hoy los tranvías sobre ruedas son gratis en Miami, al igual que el Metromover, que es gratuito gracias a un voto mío en la Comisión del Condado. Otro asunto importante es el de los seguros. Las viviendas que se están construyendo con subsidio del gobierno deben tener una cobertura de seguros contra catástrofes, como huracanes, que sea asumida por el Estado.
- Basándose en su propia experiencia, ¿qué programas de Francis Suárez continuaría y cuáles no? ¿Hay algo que recriminarle a su hijo en la posición de alcalde?
Es muy difícil criticar la gestión de Francis porque ha sido una cosa increíble. Él ha puesto a Miami en el Financial Times de Inglaterra, que dice que Miami es la ciudad más importante del mundo. Lo que ha traído Francis en términos de riqueza y de compañías que administran fondos, los wealth managers, es muy importante para cualquier ciudad porque son como bancos con dinero privado que se invierte. Él, con su manera de hacer las cosas y con su imagen nacional e internacional, ha traído 3 trillones de dólares en inversiones a Miami. Es algo que, como dice él, ha convertido a Miami en la capital del capital. Yo me concentro un poquito más en los vecindarios, en los problemitas más pequeños que requieren mucha atención, pero en estilo no somos tan diferentes. En sustancia, somos idénticos. Él fue el que propuso el transporte gratis en Miami, los ‘trolleys’ [tranvías].
- Pero, de cualquier manera, también hay que poner en contexto que al alcalde Francis Suárez, se le han criticado ciertas acciones…
Sí, hubo un momento en que cada vez que él iba a un juego o competencia, como el baloncesto o la Fórmula 1, le preguntaban quién pagó por eso. Esto es una cosa ridícula. En otras ciudades quieren que el alcalde vaya a estos eventos y represente al pueblo. Lo criticaron también por haber traído un fondo de inversiones de Arabia Saudita, que es el más grande del mundo, con más de un trillón de dólares. Lo llevó a la primera convención de ese fondo en Miami Beach, ni siquiera fue en Miami, y sin ninguna concesión ni ningún beneficio personal; al revés, tuvo que dedicarle mucho tiempo para convencerlo. Después, el bufete de Francis trabajó con este fondo en su liga de golf porque a él se le permite trabajar, pues no tiene un cargo de tiempo completo en la alcaldía. En fin, son cosas bien ridículas que reflejan la prensa negativa que tenemos en este país. Gracias a Dios, la prensa hispana no es así, ustedes no son así y le dan a uno la oportunidad de explicar las cosas.
- Hablemos de Xavier Suárez. ¿Cómo ve esta campaña por la alcaldía de Miami?
En relación con esta campaña, hay algunos individuos que están usando las redes sociales para decir cosas bien horribles de diferentes candidatos. En mi caso, deben tener mucho cuidado porque, ante la primera difamación, yo pongo una demanda. Para eso soy abogado y no tengo que pagar un abogado. Pero esta va a ser una campaña muy limpia, como siempre he hecho mis campañas. Aquí había un comité de ética integrado por ciudadanos que analizaban y daban sus evaluaciones de las campañas. Ese comité me dio siempre la mejor nota en los años 1980. Tenemos muy buen chance en las encuestas. En la segunda vuelta, que casi seguro va a haber, no hay ningún candidato que se acerque ni de lejos a mi puntaje. Así que lo que tengo que hacer es llegar a la segunda vuelta y ahí, si Dios quiere, puedo barrer a cualquiera de los contrarios porque todos los grupos étnicos de Miami me apoyan por haber sido una persona que se ha ocupado de todo el mundo, del más pobre, del más rico, del más enfermo, del que no tiene un techo. Precisamente, Francis y yo hemos hecho una gran labor con Hermanos de la Calle, a la que recaudamos cada año más de un millón de dólares de dinero privado para apoyar sus labores, lo que ha llevado a Miami a ser una de las ciudades que tienen menos homeless [personas sin hogar]. Teníamos 6.000 hace 30 años, y ahora, en la ciudad de Miami, hay menos de 500.
- Aunque todavía no ha confirmado su candidatura, hay quienes dan por seguro que uno de los contendientes por la alcaldía de Miami será el comisionado Joe Carollo, con quien mantuvo una fuerte rencilla política cuando usted terminó destituido como alcalde en 1998. ¿Lo cree posible?
Sí, es muy posible. Las encuestas muestran que hay una gran posibilidad de que estemos el uno contra el otro en la segunda vuelta. Yo trato de no hablar de mis contrarios. Ahora sí, si quedamos en la segunda vuelta, él tiene que ir a los debates. En fin, vamos a ver; hay otros candidatos importantes y veremos lo que decida nuestro pueblo, nuestro electorado en Miami.