Con muestras de cansancio luego de muchas horas de viaje con escalas, un grupo de jugadores en París, otro en Amsterdam, los mexicanos llegaron y después de firmar autógrafos se dirigieron al hotel de concentración.
Dirigidos por el colombiano Juan Carlos Osorio, están en Dinamarca 24 futbolistas, entre ellos el centrocampista Erick Gutiérrez, quien llegó con el estatus de suplente, y solo estará en Rusia si el defensa Diego Reyes o el volante Andrés Guardado no se recuperan de lesiones y causan baja.
El grupo se entrenará mañana en el estadio Brondby, donde Osorio comenzará a preparar su último amistoso ante Dinamarca, en el cual el seleccionador ensayará la alineación con la que abrirá ante los campeones mundiales.
México jugará en el grupo F del Mundial y después de enfrentar a Alemania, irá ante Corea del Sur, el 23, y Suecia, el 27.
Según Osorio, a pesar de la baja por lesión del defensa Néstor Araujo y de que Reyes, Guardado y el zaguero Héctor Moreno han demorado para recuperarse de dolencias, el equipo llegará en buena forma a Moscú con posibilidades de jugar un buen Mundial.
Además de seguir de cerca las evoluciones de Reyes y Guardado, el entrenador Osorio ocupará la semana para probar combinaciones y dejar decidida sus formaciones del Mundial que variarán en dependencia con las características de los rivales.
Después del partido del sábado, en el cual el resultado no será la prioridad, los mexicanos viajarán a Moscú el 11 de junio y allí cumplirán la parte final de la preparación.
Los mexicanos empataron sin anotaciones con Gales el pasado lunes y le ganaron 1-0 a Escocia el sábado en sus dos anteriores apariciones en las que los delanteros carecieron de puntería frente al arco, a pesar de que, sobre todo en el duelo ante los escoceses, mostraron buen funcionamiento.
Ensayar los disparos a puerta y recuperar la contundencia será una de las tareas de Osorio antes de empezar el Mundial.