CARACAS.- REDACCIÓN
El dirigente del partido Voluntad Popular sumó 30 días en ayuno, razón por lo que su salud está seriamente comprometida y hasta el momento no lo ha podido evaluar ningún médico
CARACAS.- REDACCIÓN
La oposición venezolana se alzó desafiante. El régimen chavista quedó contra la pared. El preso político Leopoldo López encabezó una huelga de hambre y 104 venezolanos lo acompañaron. El resultado: Venezuela ya tiene fecha para las elecciones parlamentarias.
La polémica por este hecho, que además es exigencia de la Constitución nacional, propuso un reto para la política de este país. Personeros del Gobierno se contradijeron incluso por la diatriba de colocarle fecha y hora a estos comicios. Ese es el caso del reconocido periodista chavista José Vicente Rangel, quien exigió un pronunciamiento del Consejo Nacional Electoral (CNE), al tiempo que la diputada oficialista Tania Díaz expresó que “las parlamentarias era preocupación de la oposición, no del chavismo”.
El desafío planteado por Leopoldo López para el régimen de Nicolás Maduro desnudó una vez más el deje “antidemocrático” con el que es manejado este Gobierno y finalmente su poco interés en mirar con madurez los tratados internacionales como el de Malta, que permite proteger a los que se encuentran en huelga de hambre.
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Luego de 30 días en huelga de hambre, sin asistencia médica de confianza ni respeto a sus derechos humanos, el líder opositor López, anunció el levantamiento de la huelga que sostuvo con el objetivo de exigir un petitorio legítimo, democrático y constitucional.
El anuncio lo realizó a través de una carta titulada “Venezuela tiene fecha para el cambio” que leyó su esposa Lilian Tintori, y que fue enviada desde Ramo Verde tras conocer la que el 6 de diciembre serán las elecciones parlamentarias tal como lo informará la presidenta del Concejo Nacional Electoral.
Comienza la huelga: salud en deterioro
López inició una huelga de hambre el pasado 27 de mayo. Desde la cárcel de Ramo Verde, donde se encuentra recluido, logró grabar un video con el que exigía un cambio urgente del sistema político.
La publicación de este mensaje en el que anunciaba el inicio de una huelga en conjunto con el exalcalde de San Cristóbal, Daniel Ceballos, para exigir el cese de la represión contra el pueblo venezolano, la liberación inmediata de todos los presos políticos, la definición inmediata de la fecha de las elecciones parlamentarias y la amplia y transparente observación internacional del proceso electoral tuvo sus consecuencias: el traslado de Ceballos de Ramo Verde a la Penitenciaria General de Venezuela (PGV) en San Juan de los Morros y el aislamiento nuevamente de López a una celda de castigo.
El mensaje era contundente y el ímpetu de ambos dirigentes inspiró conciencias logrando que poco a poco varios venezolanos se unieran a esta huelga. Sin embargo, luego de 20 días, Ceballos decide levantar su protesta y fue trasladado de vuelta a Caracas.
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López se mantuvo. Durante este tiempo su debilidad se agudizó obligando al opositor a no asistir a su última audiencia porque no podía sostenerse de pie. Lilian Tintori, esposa de López, reveló que en su última visita al centro penitenciario no podía ni levantarse. Se estima que ha perdido al menos 15 kilos de peso.
El dirigente encarcelado sumó 30 días en ayuno, razón por la que su salud está seriamente comprometida. El régimen no ha permitido que un médico personal le atienda ni organismos como la Cruz Roja han podido constatar su verdadero estado físico.
Dar la fecha para las elecciones se convirtió en el fin de la huelga de hambre de López. Tras el anuncio, Tintori ofreció una rueda de prensa para leer una carta de su esposo: “Pido a todos levantar la huelga de hambre (…) Darle fin a esta protesta no significa que no sigamos en la lucha. Vamos a lograr ir a elecciones sin presos políticos”.
Los llamados “petitorios”
De tres los tres reclamos de López, solo el de fijar la fecha para las parlamentarias se alcanzó. Quedaron por fuera dos peticiones claras: tener una amplia y transparente observación internacional del proceso electoral y la liberación de los presos políticos.
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Tibisay Lucena, presidenta del CNE, pidió a la Unasur su presencia para la contienda electoral, con lo que a simple vista pudiera creerse que se logró un segundo aspecto. Sin embargo, López en su misiva volvió a exigir la presencia de la OEA en los comicios.
Asimismo, la oposición no logró la liberación de todos los presos políticos. Sobre esto, el dirigente insistió en su comunicado que “vamos a ir a elecciones sin presos políticos”, lo cual deja a la expectativa las próximas acciones a tomar para lograrlo.