ALEPO.- Los insurgentes sirios que luchan desde hace tiempo en la ciudad de Alepo han perdido parte del territorio que controlaban en la segunda mayor urbe del país árabe. No obstante quieren seguir luchando. A continuación, unas claves para entender la situación en la ciudad:
¿Cómo es la situación militar en Alepo?
La que fuera una metrópolis comercial está dividida desde 2012. Las fuerzas del presidente Bashar al Assad controlan el oeste; los adversarios del régimen, el este. Desde el inicio de la última ofensiva, el Ejército y las milicias aliadas han tomado el 80 por ciento de las áreas insurgentes. Las milicias opositoras tan sólo tienen bajo su poder un barrio en el sureste de la ciudad. Su resistencia ha ido cediendo en los últimos tiempos con mayor rapidez. Los combates prosiguen sin tregua a pesar de una suspensión de los ataques anunciada por Rusia.
¿Quién lucha en Alepo?
Junto con el Gobierno de Damasco luchan de parte del Ejército varias milicias extranjeras. Además de la milicia chiita libanesa de Hizbola, también hay unidades de grupos chiitas de Líbano, de Irak, de Irán y Afganistán. Los adversarios al régimen se componen de varias milicias que a menudo no están de acuerdo. Insurgentes y activistas de la ciudad niegan que esté marcando la pauta el Frente Fath al Sham, próximo a Al Qaeda. En el norte de Alepo hay áreas que están controladas también por la milicia kurda YPG.
¿Y cómo es la situación humanitaria en los terrenos insurgentes?
Empeora día a día, cada vez es más dramática. El este de Alepo está prácticamente bloqueado desde julio con apenas unas pocas interrupciones. Residentes y organizaciones humanitarias informan de que apenas quedan agua potable y alimentos. El este de Alepo está en gran parte destruido. Imágenes y videos de activistas muestran barrios con los estragos de los bombardeos.
Las personas están cada vez más desesperadas. "Alepo está cansado, porque todos los edificios están destruidos, porque muchos mártires han muerto, porque han destruido los hospitales", dijo un activista. Ahora decenas de miles de personas se concentran en unos pocos barrios donde apenas encuentran cobijo. Las calles parecen tan concurridas como las de Nueva York, señala un activista. "Estamos viviendo un desastre".
¿Cuántas personas huyeron?
Debido a los combates no hay datos fiables. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que suele contar con buenas fuentes, habla de 100.000 civiles que han abandonado los territorios insurgentes por la desastrosa situación. Según la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) estima la cifra de expulsados en unos 40.000. Se trata en su mayoría de mujeres y niños, según señaló.
¿Por qué no abandonan los civiles los territorios insurgentes?
Hay diferentes razones para ello. Algunos sencillamente no quieren irse. Los activistas estiman que irán a prisión, donde serán torturados y morirán. Además, una huida es peligrosa, porque los civiles pueden caer en la línea de fuego. Ello dificulta aún más el complejo trabajo de las organizaciones humanitarias. Los residentes que huyeron del este Alepo han señalado además que las milicias insurgentes los obligaron a quedarse. Otros, sin embargo, acusan a las fuerzas del Gobierno y a sus aliados de disparar adrede contra los refugiados.
¿Por qué no capitulan los insurgentes?
Los adversarios al régimen rechazan una retirada del este de Alepo de forma tajante. "Los insurgentes son hijos de la ciudad", dijo Abdul Monaim Zain al Din, coordinador de las milicias. "Esta es su ciudad. ¿Por qué iban a retirarse? ¿Para que Al Assad siga en el poder?". Los insurgentes quieren hablar sobre el "futuro" de Alepo, cuando la ONU se haga cargo de civiles y heridos, como en territorios insurgentes. Los adversarios al régimen acusan a Rusia y al Ejército de estar haciendo un doble juego. Los grupos radicales islámicos como el frente Fatah al Sham priorizan la "muerte de mártires".
¿Es probable un nuevo alto el fuego?
No parece que vaya a ocurrir. Estados Unidos, que apoya a la oposición, no tiene medios para hacer presión en una negociación con Rusia para lograr un alto el fuego. Las posiciones de los insurgentes y los rebeldes están muy alejadas. Ex representantes del régimen señalan que aprobarían un alto el fuego, si las milicias de la oposición se retiran. Como las fuerzas del Gobierno están avanzando, no tienen interés alguno en un alto el fuego.
No obstante, esta semana la milicia terrorista Estado Islámico inició un ataque coordinado cerca de la ciudad de Palmira, en el centro de Siria. Si el Ejército envía allí a las fuerzas que están en Alepo, la su postura sobre un alto el fuego podría cambiar.
FUENTE: dpa
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