Serbia revive la leyenda del vampiro Sava Savanovic, el Drácula serbio
El monstruo habitaba en el molino del pueblo junto al arroyo.
"Todas las muertes ocurrieron en un radio de un kilómetro alrededor del viejo molino", asegura Vujetic a modo de prueba. (Foto: Daniel Iriarte/DLA)
Sobre el dintel de la casa de Slobodan Jagodic cuelgan un diente de ajo y una rama de espino.
u201cEsa es la mejor protección que existe contra los vampiros u201d, dice su amigo Miodrag Vujetic. Ambos son vecinos de la aldea serbia de Zarozje, muy cerca de la frontera con Bosnia.
Un lugar donde, de acuerdo con la tradición, siempre han abundado los casos de vampirismo. nMiodrag y Slobodan están preocupados por lo que, aseguran, podría ser el resurgimiento del monstruo local: el vampiro Sava Savanovic, que, según la leyenda, habitaba el molino del pueblo junto al arroyo.
Pero el pasado invierno, la construcción se hundió por el peso de las nieves, y desde entonces, varios accidentes mortales han tenido lugar en el pueblo. Y para algunos, el culpable no es otro que el monstruo.
u201cTodas las muertes ocurrieron en un radio de un kilómetro alrededor del viejo molino u201d, afirma Vujetic, a modo de prueba. n u201cEn el molino hay algo raro u201d, dice Jovan Teic, un agricultor de 73 años.
u201cEs posible que sea el lugar de reunión de algún tipo de mafia, aunque no creo que la mafia mate a nadie solo por diversión.
El caso es que nadie que haya dormido allí ha sobrevivido u201d, asegura. Pero en esta localidad no todos creen en el vampiro. u201cNo hay ninguna prueba científica que demuestre la existencia de Sava Savanovic u201d, afirma Vitor Filipovic, un comerciante de 44 años que ahora vive en Belgrado y que está de paso por Zarodze.
u201cEs un mito para asustar a los niños. Nadie puede hacerme creer en vampiros u201d, dice, aunque admite la existencia de las muertes y de algunos episodios u201cmisteriosos u201d. n u201cSava Savanovic ha estado matando gente en esta zona durante los núltimos cien años u201d, nos dice Slobodan, un agricultor relativamente próspero, cuyas tierras lindan con el famoso molino.
Los locales cuentan que Savanovic era el molinero del pueblo, un hombre grande y hosco que a su muerte se transformó en vampiro por motivos desconocidos.
La historia fue recogida por el escritor costumbrista Milovan Glisic, quien popularizó el personaje hasta convertirlo en u201cel Drácula serbio u201d.
En 1973, la televisión yugoslava realizó una adaptación de este relato, la película u201cLeptirica u201d, que aquí todos conocen. n
En Serbia abundan las historias de vampiros. La primera mención a estas criaturas en los Balcanes aparece en el Código del Emperador Dusan de 1342, que prohibió a los sacerdotes aparecer en los funerales de personas bajo sospecha de ser vampiros. Y aquí tuvo lugar, en 1732, el caso de Arnold Paole, el primer episodio de vampirismo documentado científicamente por el cirujano militar del ejército austriaco Johann Flückinger, en el famoso texto u201cVisum Et Repertum u201d.
En la región de Zarozje, hace medio siglo, los ladrones solían vestirse de vampiros durante sus robos, porque de ese modo, si eran sorprendidos, era mucho más improbable que alguien tratase de detenerlos, cuenta Jagodic. nLos habitantes de Zarozje son conscientes de esta tradición, y por ello, en la entrada del sendero que conduce al molino hay un cartel que reza:
u201cEl primer vampiro de Serbia u201d, junto a una figura a tamaño natural del monstruo. La imagen fue creada por el Museo Nacional de la vecina ciudad de Valjevo durante una feria, para promocionar el turismo.
u201cFue un truco de marketing, hace dos años, pero a la iglesia ortodoxa no le gustó el asunto, así que no seguimos adelante u201d, explica Lubitsa Maric, etnóloga de dicho museo. nJagodic y Vujetic, entre otros, insisten en que es necesario reconstruir el molino para impedir que la criatura siga matando.
u201cHay un proyecto municipal, pero está parado. El nuevo alcalde no quiere invertir en ello bajo ningún concepto u201d, dice Jagodic. u201cHemos probado a pedir fondos a las autoridades regionales, pero no lo hemos conseguido u201d, asegura. n
Por ello, muchos sospechan que esta vehemencia podría no ser sino un intento de atraer visitantes a la zona, explotando el mito de Sava Savanovic tal y como se hace con Drácula en la muy turística Transilvania.
u201cAquí todos somos partidarios de construir algo que atraiga a los turistas u201d, asegura Filipovic. u201cPero, en realidad, u00bfqué podemos mostrarles?", se pregunta, resignado."Un viejo molino, que encima está roto u201d.