CARACAS - REDACCIÓN
Pese al anuncio de miles de millones de dólares para inversiones, dinero del Fondo Chino no aumenta la producción en las empresas”, expresó Jorge Carvajal Morales.
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La inminente paralización de las empresas básicas de la región de Guayana, Venezuela afectará de manera directa a la economía de esta nación suramericana y se traducirá en números concretos en el despido más de 65 mil trabajadores, más de 195 mil de forma indirecta y a más de un millón 300 mil personas.
“No hay insumos, no hay repuestos, no hay equipos, algo incomprensible sobre todo porque el presidente Chávez hasta el 2012 y el presidente Maduro, ahora, anunciaron miles de millones de bolívares y en dólares para inversiones, dinero del Fondo Chino y no aumenta la producción en las empresas”, expresó Jorge Carvajal Morales, dirigente político en Venezuela.
Carvajal hizo una rápida relación de la productividad de las empresas del estado. Por ejemplo, Sidor tiene una capacidad instalada, o tenía antes de la destrucción actual, de 4.700 millones de toneladas de acero líquido. Sidor, Minerven, briqueteras y el aluminio producen al 15% “En este momento Sidor produce al 15%, eso significa menos de un millón de toneladas por año, algo que no pasaba desde la década del 70”, agregó.
Si son las empresas del aluminio, Alcasa sólo tiene dos líneas y Venalum vive la misma situación y entre ambas no llegan a 250 mil toneladas de aluminio primario al año. Si se trata de Minerven, la capacidad instalada de la planta era de 8 mil toneladas por año pero en estos momentos está al 15%, lo que significa que mensualmente se llega a duras penas a 100 kilos, dijo Carvajal.
Carvajal cree que el problema es económico y que se cometió un error al creer que con política se resolvía la economía. “A todo eso debemos agregar que hay un proceso de desinversión que comenzó en el 2005, se profundizó en el 2010 cuando se aplicó el mortal racionamiento eléctrico que dejó a Guayana casi boqueando y se convirtió en política de Estado desde el 2013”, precisó el abogado de profesión.
Se le consultó sobre los 314 millones de dólares dispuestos para Sidor; los 2500 millones de bolívares para el aluminio; las inversiones para el sector hierro y responde que “o fueron mentira o todo ese dinero se perdió, se lo robaron, se lo llevaron o nunca llegó porque nada justifica el perolero y palero en que se han convertido unas empresas que fueron referencia mundial en producción y productividad”, expresó.
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