En medio de una ola de criminalidad, el ex alcalde de Caracas Freddy Bernal solicitó al Gobierno de Nicolás Maduro "militarizar" a la capital de Venezuela, "o el Estado se diluye ante la violencia desatada".
Tras el asesinato de un policía adscrito a la alcaldía, que fue asesinado junto a su hijo en la populosa barriada de El Cementerio, compañeros del agente intentaron detener a los responsables, pero tuvieron que replegarse ante el poder de fuego y la sofisticación del armamento en manos de bandas juveniles.
"¿Cuántos funcionarios policiales y civiles deben morir? ¡Hay que tomar policial y militarmente los corredores de la muerte de Caracas!", expresó el también ex parlamentario y policía de profesión, quien participó en el segundo golpe de Estado contra el presidente constitucional Carlos Andrés Pérez, el 27 de noviembre de 1992.
Tras 17 años y 22 planes de seguridad, el Gobierno de Nicolás Maduro intenta revertir sin éxito, uno de los fracasos más rotundos del "legado" del fallecido Hugo Chávez.
Expertos en seguridad ciudadana, como Luis Izquiel y Fermín Mármol García, han sido duros críticos de la utlización de fuerzas militares para combatir al hampa, ya que no poseen ni la formación, ni la experticia para este tipo de operativos. "Los militares están formados para la guerra, cuando salen a combatir el crimen, han dejado mucho que desear y el saldo de pérdidas humanas es elevado", expresaron los abogados de profesión tras los llamados Operativos de Liberación del Pueblo (OLP), implementados por Maduro.
"Según informes, al menos 10 personas murieron en la parroquia local de El Valle, en el municipio Libertador de Caracas el 21 de marzo, durante un enfrentamiento entre bandas locales por el control de las zonas de tráfico de drogas. Tres bandas locales se reunieron, cerca de 150 miembros de 17-19 años de edad y tomaron el control total de la barriada de Cerro Verde utilizando rifles de asalto AR-15 , pistolas de 9 milímetros y granadas", informó el portal La Patilla, citando a la organización IHS Janes.
Segun dicha organización, "la situación continuará deteriorándose durante el año ya que las autoridades gubernamentales no están abordando el origen de la delincuencia y la violencia, que incluyen la desigualdad de ingresos, instituciones débiles, la corrupción generalizada, la falta de capacidad de aplicación de la ley, la falta de coordinación entre los niveles nacional, regional , y las policías municipales, e incluso la participación del equipo de gobierno y los funcionarios militares como apoyo logístico a las operaciones de tráfico de drogas de los países andinos a los Estados Unidos y Europa a través de América central y el Caribe" informó La Patilla.
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