Este sábado 16 de mayo se cumplió el primer año de la desaparición de la embarcación Ana María que zarpó en el oriente del país y de la cual aún no se tiene rastros de la tripulación.
Este sábado 16 de mayo se cumplió el primer año de la desaparición de la embarcación Ana María que zarpó en el oriente del país y de la cual aún no se tiene rastros de la tripulación.
En la embarcación viajaban 33 venezolanos que salieron desde el muelle La Playita de la localidad de Güiria, en el estado Sucre y las autoridades no han podido localizar su cuerpos. Entre los tripulantes del Ana María, se encontraban dos niños y una mujer embarazada.
Las pocas pistas sobre este caso las dio, Alberto Abreu, capitán de la embarcación que se encuentra prófugo de la justicia de Venezuela, a través de un video en el que aseguró que el bote se volteó luego de ser impactados por dos olas.
Abreu también afirmó que intentó nadar hacia una costa cercana para pedir ayuda despúes de lo sucedido.
Hipótesis de un secuestro
Mientras los familiares de las víctimas reclaman por saber sobre la tribulación, Daniel Abreu, hermano mayor del capitán, que a través de un informante anónimo vinculó con el caso y aseguró al portal web El Nacional que podría tratarse de un secuestro masivo luego que el capitán ofreciera la embarcación en Trinidad y Tobago.
"El capitán entregó esa embarcación y a la tripulación para pagar la deuda que tenía su hermano y a él lo echaron al agua. El trinitario que les prestó el dinero puede tener a los familiares secuestrados".
Según reseña el portal web, los hermanos Alberto Abreu como Daniel Abreu han estado presos por delitos relacionados con la trata de personas, sin embargo, las autoridades locales "los dejan libertad por recibir sobornos en dólares", señaló el informante.
FUENTE: REDACCIÓN