Días antes, Jarocha Reyes Vega, coordinadora de programas en la emisora Radio Rebelde, denunciaba que a las 11 de la mañana, en el banco de 23 y 8, en el Vedado, ya no había efectivo. Un trabajador del lugar le respondió que los cajeros se cargaban por horario, y que a ese no le tocaba hasta las 12 y 30 am, reseña el portal web Radio Televisión Martí.
La situación es extensiva a otras provincias del país.
El periodista José Alemán Mesa, corresponsal de la Agencia Cubana de Noticias (ACN) en Ciego de Ávila, responsabilizó a los dueños de negocios privados que depositan “sacos de billetes de baja denominación” en mal estado.
“Tengo conocimiento de cuentapropistas que han ido a depositar sacos de pesos, cerca de 500 000.00, en billetes de 10.00 y 20.00. Ellos mismos, luego, buscan billetes grandes en los cajeros automáticos”, decía.
Lilian Rosa Saunders, especialista provincial en Comunicación y Marketing del Banco de Crédito y Comercio (Bandec) en Guantánamo explicó al periódico oficial Venceremos que, a nivel nacional, hay escasez de “billetes nuevos o en buen estado”, que son los que deben usar los cajeros, porque los viejos “desprenden un polvillo que deteriora el equipo”. Como alternativa, habilitaron el pago por caja dentro de las sucursales bancarias.
“La falta de efectivo en los bancos cubanos no es un fenómeno de ahora, sino que tiende a producirse de forma continuada desde que el régimen inició una carrera loca y expansiva del déficit público que no tiene absolutamente ningún control”, comentó a Martí Noticias el economista Elías Amor.
“El déficit público en Cuba se financia a través de los bonos en el sistema bancario en determinadas épocas del año para retirar el líquido que se encuentra disponible. Por ese motivo es que los bancos, en un determinado momento, se cargan de esos bonos en sus activos y dejan de tener el líquido con el que se suministra el efectivo en los cajeros automáticos. Normalmente, la liquidez que se detrae es en pesos cubanos, aunque también ocurre con la Moneda Libremente Convertible (MLC) e, incluso, con las divisas”, puntualizó
Para el economista Omar Everleny, otra de las razones que influye en este problema es la infraestructura física. “Hay muchos cajeros rotos y muy pocos para la demanda”
“Ha habido falta de liquidez monetaria, hay que imprimir más billetes de alta denominación. Se pensó que en Cuba un billete de 1.000 era lo más alto, pero para los elevados precios existentes hoy habría que pensar en emitir una moneda de 5.000 pesos, y eso amortiguaría mucho el movimiento de efectivo en los cajeros automáticos”, comentó.
En ese sentido, aclaró el experto, “las principales monedas se atesoran en La Habana, donde están las bóvedas principales, y no hay gasolina para el traslado a provincia de ese dinero en óptimas condiciones… Esas máquinas utilizan billetes nuevos y esos se van agotando”.
Para el economista la dictadura de Cuba "tiene que aplicar medidas de control para que el presupuesto del Estado esté equilibrado, es decir, tienen que dejar de gastar sin reparo de una manera descontrolada en todos esos apartados relacionados a los logros de la Revolución, las organizaciones de masas, las ferias, los certámenes… Gastan demasiado para lo que ingresan, porque la economía está en recesión o estancada, y los ingresos tributarios y no tributarios no crecen. Sin embargo, ellos mantienen el gasto. No lo pueden frenar, y entonces eso genera una situación de déficit".
Elías Amor insistió en la responsabilidad de la dictadura para la solución de este problema, y las consecuencias de no solucionarlo a corto plazo.
“Cuanto más se tarden en aplicar esa estrategia de consolidación fiscal, más duro va a hacer el ajuste que se va a tener que realizar, afectando sobre todo a los colectivos vulnerables. La solución para este tipo de problemas es el control, control económico, fiscal y monetario. Parece mentira que una economía de planificación fiscal intervenida y en la que no hay derechos de propiedad el régimen no realice ese control como debiera”, recalcó.
Everleny, por su parte, consideró que “Cuba está muy atrasada en el sistema de pagos. A muchas personas de avanzada edad les depositan la jubilación en tarjetas y después no pueden pagar nada con ese dinero si no lo extraen. Tienen que hacerse otros cambios de forma general, por ejemplos en las bodegas no se utiliza el comercio electrónico todavía”.
A mediados de abril, la dictadura limitó la extracción de efectivo a Mipymes, cuentapropistas y otros actores económicos del sector privado.
Ladys Mora García, subdirectora del área contable en la Dirección Provincial de Bandec, en La Habana, dijo en ese momento que la nueva normativa permitiría “mejorar el servicio” y que durara “un poco más la disponibilidad de efectivo”.
La funcionaria admitió que la falta de efectivo no era el único problema de los cajeros automáticos. “Existen otros problemas técnicos que también afectan y no dependen de nosotros, sobre todo la falta de comunicación, que no conectan con la base de datos. En algunos lugares estuvimos un día sin conexión y ahí el cajero no funciona. También hemos tenido afectaciones por apagones, dificultades técnicas con los dispensadores y falta de piezas de repuesto”, explicó.
Ante la falta de efectivo en los bancos, proliferan las denuncias de trabajadores en Cuba a los que no les pagan sus salarios correspondientes. La pasada semana empleados de Antillana de Acero se plantaron por el impago de sus salarios en los últimos dos meses, provocando la cancelación del servicio ferroviario que va de Artemisa a La Habana. La noticia, que circulaba ya en redes sociales, fue confirmada poco después por la Dirección Provincial de Transporte, aunque las autoridades atribuyeron el paro a la "negligencia de los tripulantes”.
"La Unión de Ferrocarriles de Cuba, de conjunto con las autoridades de la provincia, crearon una comisión para investigar las causas y condiciones que originaron este lamentable incidente y aplicar las medidas organizativas y disciplinarias que correspondan, para que hechos como estos no se repitan", explicaron en una nota oficial.
FUENTE: Radio Televisión Martí