En India, cuando uno decide montarse en un mototaxi ("rickshaw"), suele renunciar al comfort, pero a cambio obtiene la oportunidad de llegar más rápido al destino en una ciudad repleta de atascos. En ese recorrido, el pasajero se expone a todo tipo de ruidos de motor, bocinas o polución, pero también a los niños de la calle que piden limosna. Estos pequeños vehículos de tres ruedas a motor de pequeña cilindrada están expuestos al viento, a las inclemencias del tiempo y a las personas.
Pero desde enero pasado la embajadora mexicana en la India, Melba Pría, se somete a ese estrés con un inesperado éxito diplomático.
"Jamás hubiésemos creído que hubiese provocado tanto revuelo", dijo en entrevista con dpa. "Quisimos hacer publicidad para nuestro país, pero con un toque indio. Jamás imaginamos que hubiese funcionado tan bien".
Pría ha convertido en su coche oficial uno de estos "rickshaw" motorizados que, con su matrícula diplomática, consigue llamar la atención en las calles de Nueva Dehli. A diferencia de los cerca de los 100.000 mototaxis restantes en la ciudad, de color verde amarillo, el de la embajada mexicano es de color blanco. Y la capota de plástico ha sido decorada con flores por un artista mexicano.
"Al principio no me sentía a gusto conduciendo un 'rickshaw' en lugar de un coche normal", dijo Rajendra Kumar, uno de los chóferes de Prías. "Pero ahora me parece bien. Muchas veces acuden personas para hacerse fotos con el 'rickshaw' y conmigo. Y casi siempre encuentro un lugar donde aparcar", agregó.
La ministra de Asuntos Exteriores de India, Sushma Swaraj, se han fotografiado con el poco convencional vehículo diplomático. Cuando su chofer se acercó a recogerla con el vehículo de tres ruedas, la ministra sacó una foto con su móvil. "Hasta el primer ministro (de India), Narendra Modi, me preguntó si yo era la diplomática del 'rickshaw'", recordó Pría.
Pero en el Ministerio del Exterior no fue todo tan sencillo al principio, cuando Pría acudió por primera vez con la idea le dijeron que iba contra el protocolo y las medidas de seguridad, sin embargo, Pria consiguió imponer su idea.
"A mis colegas en México les dije que ya tenía un "rickshaw" en el garaje. Y ahora están orgullosos de que pertenezca a nuestra flota de vehículos". Y el éxito ha sido tal, que la embajada ya se está planteando adquirir un segundo de estos vehículos.
Lo único que preocupa a la embajadora Pría es la temporada del monzón, la estación de lluvias en la que se suelen cubrir los vehículos con plásticos. "Eso no se ve muy hermoso", dijo la embajadora. Pero por lo demás, el agotador clima en la capital india no suele ser un obstáculo para la embajadora. "Claro que después de un trayecto largo a veces escuecen los ojos o el peinado ya no está tan arreglado. Pero eso les pasa a muchos aquí ¿Por qué debería ser yo una excepción?".
(CORTESÍA.bbc.com)
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