El turismo en Cuba se apaga con la caída récord en ingresos de casi el 62% en los últimos cinco años, reveló Cuba Siglo 21 en un nuevo dossier publicado. El laboratorio de ideas pone números al descalabro del turismo en la Isla e identifica varios factores que explican una de las peores crisis del sector en décadas.
En el informe "GAESA también apaga la industria turística", el economista Emilio Morales revela que, pese a una inversión superior a los 24.000 millones de dólares en los últimos 15 años, el sector ha mostrado una caída alarmante en indicadores clave, detalla el portal webDiario de Cuba.
De acuerdo con Morales, entre enero y octubre de 2024, el arribo de turistas cayó un 48,23% en comparación con el mismo período de 2019, antes de la pandemia. Solo 1.718.636 visitantes llegaron al país durante estos meses, muy lejos de los 3,5 millones proyectados inicialmente por el Gobierno para este año.
Además, la ocupación hotelera se encuentra en un 25% y los ingresos del sector han descendido un 61,82% en los últimos cinco años, pasando de 3.185 millones de dólares en 2019 a apenas 1.216 millones en 2023.
La caída afecta de manera generalizada a los principales mercados emisores, señala el informe. Pone como ejemplo a los turistas canadienses, que representan el 39,41% del total y disminuyeron un 19,15% respecto a 2019.
Por su parte, los cubanos residentes en el exterior registraron una reducción del 52,56%, mientras que los viajeros procedentes de Estados Unidos cayeron un 73,93%. Europa también muestra un desplome significativo, con países como Reino Unido, Francia e Italia liderando las caídas, superiores al 70% en algunos casos.
Causas del colapso
El dossier identifica varios factores que explican este descalabro, entre ellos el control del Grupo de Administración Empresarial SA (GAESA) sobre las finanzas y decisiones económicas y que ha priorizado inversiones turísticas en detrimento de sectores estratégicos como energía, transporte y agricultura.
Detrás del desastre del turismo también está la crisis multisistémica, considera Morales. Cita los apagones constantes, el deterioro urbano, las epidemias como el dengue y una creciente criminalidad que han hecho del país un destino poco atractivo.
El informe también apunta que la emigración masiva ha reducido la fuerza laboral calificada, afectando la calidad de los servicios y el apoyo de La Habana a Rusia en su invasión a Ucrania ha alienado a mercados europeos clave. Las alianzas del régimen con actores terroristas internacionales "lo mantienen en esa corta lista de países asociados con ese flagelo", añade.
Por otro lado, la desconfianza del exilio cubano de los llamados a invertir en la Isla ha limitado el potencial turístico de la diáspora que en forma creciente se ha desviado hacia República Dominicana como punto alternativo para encuentros familiares.
Para Cuba Siglo 21, el desplome turístico plantea graves retos económicos. "Para revertir la situación, sería necesario abordar problemas estructurales como la crisis energética y de suministro de agua, mejorar la seguridad sanitaria, atraer inversiones extranjeras y fomentar la confianza de los mercados internacionales", considera.
FUENTE: Con información de Diario de Cuba