LIMA.- El Gobierno de Perú realizó una compra de más de 1.500 armas de diferentes modelos, incluyendo fusiles, escopetas y pistolas, así como más de 3.000 granadas lacrimógenas y bombas de humo. Esta medida se tomó con el objetivo de reforzar al Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, ante las recientes manifestaciones que han tenido lugar en la capital, Lima.
Según informaciones recogidas por el diario local 'La República', la operación de compra se llevó a cabo directamente y sin licitación, bajo el supuesto de una situación de emergencia en la capital, previendo una multitudinaria protesta antigubernamental que finalmente se desarrolló el miércoles sin mayores incidentes.
A pesar de que la adjudicación de la compra se realizó el 31 de mayo, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas peruanas no ha proporcionado los detalles del proceso ni la cantidad invertida en esta adquisición, incumpliendo con la normativa vigente de registro en el Sistema Electrónico de Adquisiciones y Contrataciones del Estado.
La presidenta peruana, Dina Boluarte, autorizó a comienzos de febrero la transferencia de más de 233 millones de soles peruanos (alrededor de 65 millones de dólares) al Ministerio de Defensa nacional, en respuesta a las constantes manifestaciones en contra de su gobierno.
La ciudad andina de Lima fue testigo el miércoles de la tercera convocatoria de la manifestación 'Toma de Lima', una marcha ciudadana que expresó su oposición al gobierno de Boluarte y demandó su dimisión del cargo. Boluarte asumió la Presidencia en diciembre de 2022, tras la destitución y detención del entonces jefe de Estado, Pedro Castillo, luego de un intento de arrogarse más competencias.
FUENTE: Con información de Europa Press