Haití se enfrenta a una grave crisis humanitaria, con una calma precaria en la capital, Puerto Príncipe, y disparos reportados en algunos barrios
Miembros de la Unidad de Seguridad General del Palacio Nacional, USGPN, Haití.
AP/Odelyn JosephPUERTO PRÍNCIPE.- Haití se encuentra en un estado de incertidumbre mientras se aproxima la formación de un "consejo presidencial de transición" tras la renuncia del primer ministro Ariel Henry. Sin embargo, persisten dudas sobre si las pandillas que controlan el territorio estarán dispuestas a dar una tregua en este país caribeño empobrecido.
Henry, cuya gestión fue cuestionada tanto a nivel nacional como internacional durante un tiempo, anunció el lunes la aceptación de la instauración de un "consejo presidencial de transición". En un video difundido por la noche, expresó su compromiso de continuar manejando los asuntos corrientes hasta que se nombre un nuevo primer ministro y se forme un gobierno.
La dimisión de Henry tuvo lugar después de una reunión de emergencia sobre Haití en Kingston, convocada por la Comunidad del Caribe y en la que participó el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, instó a todas las partes involucradas en el acuerdo político en Haití a actuar con responsabilidad y avanzar hacia la restauración de las instituciones democráticas mediante elecciones pacíficas y creíbles.
Sin embargo, la comunidad internacional enfrenta un revés en sus esfuerzos por reducir la violencia en Haití, ya que Kenia decidió suspender su participación en una misión liderada por policías kenianos debido al cambio en las circunstancias tras la ruptura total del orden y la renuncia de Henry.
A pesar de estos desafíos, Estados Unidos restó importancia a esta suspensión, argumentando que un acuerdo de transición facilitará el establecimiento de un nuevo gobierno, y destacó la importancia de mantener la continuidad de la misión internacional.
En medio de este contexto tenso, Haití se enfrenta a una grave crisis humanitaria, con una calma precaria en la capital, Puerto Príncipe, y disparos reportados en algunos barrios. La inseguridad llevó a la evacuación del personal no esencial de varias embajadas, incluida la francesa y la de la Unión Europea, debido a la constante amenaza de grupos criminales.
El Programa Mundial de Alimentos de la ONU advirtió sobre "una de las crisis alimentarias más graves del mundo" en Haití, con 1.4 millones de personas al borde de la inanición. La situación es especialmente preocupante en Puerto Príncipe, donde las actividades cotidianas como ir a la escuela o al supermercado se han vuelto extremadamente arriesgadas debido al control ejercido por las pandillas.
Con la dimisión de Henry, quien asumió el cargo tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021, se espera que un consejo presidencial de transición, compuesto por representantes de los principales partidos políticos, la sociedad civil y el sector privado, tome las riendas del país. Sin embargo, este nuevo gobierno enfrentará enormes desafíos en un país marcado por la violencia de las pandillas y la inestabilidad política.
FUENTE: Con información de AFP
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