CARACAS.- El régimen de Nicolás Maduro confrontó a la Comunidad del Caribe (CARICOM), que recientemente acusó a Venezuela de mantener una postura agresiva hacia Guyana en la disputa por el territorio del Esequibo, una región rica en recursos naturales.
En una declaración conjunta, los cancilleres de CARICOM destacaron que “Venezuela continuó su postura agresiva hacia Guyana” a pesar de las medidas provisionales ordenadas por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) el 1 de diciembre de 2023 y la Declaración Conjunta de Argyle para el Diálogo y la Paz, firmada el 14 de diciembre de 2023.
En tal sentido, el régimen de Maduro acusó a CARICOM de promover una narrativa "maliciosa y tergiversada" que busca presentar al país como una nación agresora. Además, alega que el Esequibo le fue arrebatado a Venezuela injustamente a finales del siglo XIX.
La CIJ había ordenado a Venezuela no tomar acciones que alteraran el control de Guyana sobre el Esequibo. Sin embargo, Guyana acusó a Venezuela de ignorar esta orden, especialmente después de que Maduro promulgara en abril una ley para crear el estado Esequibo, tras un referéndum celebrado en diciembre de 2023, en el cual más del 95% de los partidarios apoyaron la anexión del territorio.
El referéndum planteaba la creación de un nuevo estado venezolano, donde se otorgaría ciudadanía a los residentes actuales y futuros del Esequibo. Sin embargo, las implicaciones prácticas y jurídicas de esta ley siguen siendo inciertas, al igual que la manera en que Venezuela pretende ejercer su jurisdicción sobre el área.
El fallo de la CIJ sigue siendo legalmente vinculante mientras el tribunal evalúa el caso presentado por Guyana contra Venezuela. Caracas, por su parte, no reconoce la competencia de la CIJ en este asunto.
Fortalecimiento militar
Los ministros de CARICOM también manifestaron su preocupación por el “fortalecimiento militar continuo de Venezuela en la frontera” con Guyana. El régimen de Maduro rechazó estas acusaciones y acusó a Guyana de realizar “acciones belicistas” mediante alianzas con entidades militares, como el Comando Sur de Estados Unidos.
Mientras Guyana insiste en que la CIJ debe resolver la disputa, el régimen de Maduro aboga por una solución negociada dentro del marco del Acuerdo de Ginebra, firmado con el Reino Unido en 1966, poco antes de la independencia de Guyana. Este acuerdo reconocía el reclamo de Venezuela y buscaba una solución diplomática.
En 2018, ante la falta de avances en las negociaciones bilaterales, Guyana llevó el caso ante la CIJ, solicitando la ratificación del fallo de 1899, cuando Guyana era una colonia británica. Maduro sostiene que Venezuela cuenta con documentos históricos que prueban la nulidad del laudo arbitral de 1899 y que, conforme al Acuerdo de Ginebra, este fallo no es reconocible.
En abril de 2023, la CIJ emitió que el caso tiene mérito y se declaró competente para continuar con el proceso, aunque se espera que la decisión final tome varios años en llegar.
FUENTE: Con información de AP