CARTAGENA.- El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, inició este lunes una reunión con medio centenar de venezolanos en Cartagena de Indias para conocer de primera mano la situación que viven tras abandonar su país.
CARTAGENA.- El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, inició este lunes una reunión con medio centenar de venezolanos en Cartagena de Indias para conocer de primera mano la situación que viven tras abandonar su país.
La reunión se realizó en la "Calvary Chapel", una iglesia cristiana ubicada en el turístico barrio de Bocagrande de Cartagena.
El encuentro comenzó con una oración a la que también acudió la esposa del vicepresidente estadounidense, Karen Pence.
Posteriormente, ambos conversaron con los venezolanos para conocer cómo es su vida en Colombia y en su país natal.
El medio centenar de venezolanos que acudieron al encuentro no portaban distintivos de partidos políticos o emblemas de su país, según pudo constatar Efe.
Pence inició este domingo en Colombia una visita oficial que incluyó una reunión con el presidente Juan Manuel Santos en la que la crisis que vive Venezuela estuvo muy presente y ante la que aseguró que su país no se quedará "de brazos cruzados".
"Venezuela se está deslizando hacia la dictadura y, como el presidente Donald Trump ha dicho, Estados Unidos no se quedará parado mientras Venezuela se desmorona", dijo Pence.
Venezuela es un "estado fallido" que amenaza a todo el hemisferio
El vicepresidente de EEUU, también aseguró que Venezuela es un "estado fallido" que supone una "amenaza a la seguridad y la prosperidad de todo el hemisferio".
"Un estado fallido (como) lo que hay en Venezuela amenaza la seguridad y la prosperidad de todo el hemisferio", dijo Pence a periodistas tras reunirse con venezolanos que han abandonado su país debido a la crisis y han llegado a Colombia.
En este sentido, reiteró que EEUU "no se quedará de lado" mientras que Venezuela "cae en una dictadura" tal y como lo adelantó el Presidente Trump.
Pence hizo mención a la Asamblea Constituyente, así como a "la pobreza" que vive el país y la muerte de "más de cien personas" que fueron asesinadas durante las manifestaciones antigubernamentales.
Para el vicepresidente, esa situación que vive Venezuela hará que haya "un mayor tráfico de familias victimizadas" que llegarán a Estados Unidos, así como una "mayor inmigración ilegal" que puede "comprometer" sus fronteras, así como "la economía y la seguridad".
"Estamos absolutamente determinados para llevar en su medida completa el poder económico y diplomático de Estados Unidos hasta que la democracia se restablezca en Venezuela", subrayó.
Por último, explicó que Estados Unidos "tiene una gran historia de generosidad con los refugiados" y mostró su disposición de ayudar a Colombia ante la llegada de venezolanos "para evitar privaciones económicas y la situación política".
Según Migración Colombia, se registran 50.000 pasos diarios entre Colombia y Venezuela de ciudadanos de ese segundo país que llegan en busca de productos de primera necesidad.
Además, entre 300.000 y 350.000 venezolanos llegaron al país "con vocación de permanencia".
Tras concluir su visita a Colombia, el vicepresidente estadounidense partirá a Buenos Aires, donde continuará una gira por varios países latinoamericanos que también incluirá Chile y Panamá.
Desde 1 de abril Venezuela ha sido escenario de protestas a favor y en contra del Gobierno, con un balance de más de 120 muertos, sin embargo, el nuevo fiscal general, Tarek William Saab, aseguró que esa cifra contabilizada por su antecesora era muy alta al incluir a personas muertas en contextos distintos a las manifestaciones.
FUENTE: EFE