BUENOS AIRES.- REDACCIÓN DLA / EFE / AP
A petición de la oposición, el debate comenzó con un minuto de silencio en memoria del fiscal Alberto Nisman, muerto de un tiro en la cabeza en circunstancias aún sin aclarar. Precisamente el Gobierno enmarcó este caso en una operación de desestabilización de agentes de Inteligencia desplazados de sus cargos en diciembre pasado e impulsó la reforma aprobada este jueves.
LEA TAMBIÉN: La fiscal de la causa sobre la muerte de Nisman dice que aún es prematuro decir si se suicidó
La ley plantea la disolución de la Secretaría de Inteligencia (SI) y su sustitución por una Agencia Federal que se nutrirá con los mismos miembros de la SI. La oposición argentina considera que no resolverá las falencias del organismo que quedaron al descubierto con la muerte del fiscal Alberto Nisman.
LEA TAMBIÉN: Falso desertor de inteligencia iraní habría asesinado a Nisman
Al dar inicio a la discusión, la diputada kirchnerista Diana Conti aseguró que se trata de una "pelea por la democratización de los servicios de Inteligencia en el país y la ruptura del maridaje que se da perversamente entre sectores del poder judicial, los organismos de inteligencia y algunos sectores de la política".
El instrumento jurídico fue aprobado con 131 votos a favor de oficialistas y varios aliados y 71 en contra, tras un debate que se prolongó hasta la madrugada.
Alerta opositora
La bancada opositora afirmó que con esta ley el gobierno pretende desviar la atención pública de la denuncia que hizo Nisman el 14 de enero contra la presidenta Cristina Fernández y retomar la iniciativa política tras ver afectada su imagen por la misteriosa muerte del fiscal cuatro días, después de presentar su acusación.
Nisman acusó a Fernández, al canciller Héctor Timerman, a un diputado nacional, a dos supuestos espías y a dirigentes sociales afines al gobierno de haber participado en un plan para encubrir a los iraníes acusados del atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en 1994. El investigador fue hallado muerto en su departamento de Buenos Aires con un tiro en la cabeza y todavía se desconoce si el hecho fue un asesinato, un suicidio voluntario o un suicidio inducido.
Traspaso del sistema de escuchas telefónicas
Una de las mayores críticas a la ley, que ya había sido aprobada por el Senado, es que las intervenciones telefónicas pasarán de la órbita de los servicios secretos a la del Ministerio Público Fiscal, cuya jefatura -según opositores y analistas- responde al gobierno. Los críticos señalaron que lo conveniente es que sea la Corte Suprema de Justicia la que se haga responsable de esas intervenciones.
Sin embargo, según la diputada oficialista Diana Conti, "sacándole la tarea de las escuchas" a la secretaría de Inteligencia "y poniéndola en otro poder del Estado, se le saca la tarea fundamental para que el contubernio entre los agentes y el Poder Judicial deje de existir".
Antecedentes
Desde 1983, cuando se restableció la democracia, ningún gobierno pudo controlar y transparentar los servicios secretos, que según analistas operaron para los intereses de los distintos Ejecutivos, partidos políticos, jueces y grupos periodísticos.
Tras la misteriosa muerte de Nisman se hizo cada vez más evidente la existencia de una guerra interna en los servicios secretos a favor y en contra del gobierno.
La presidenta dijo que el ex jefe de inteligencia Antonio "Jaime" Stiuso, echado de los servicios secretos en diciembre, suministró datos falsos a Nisman para fundamentar su denuncia contra ella y sugirió que el ex espía está detrás de la muerte del fiscal que, según sostuvo, buscaba desestabilizar a su gobierno.
LEA TAMBIÉN: La presidenta argentina cuestionó por "opositora" la marcha por Nisman
LEA TAMBIÉN: "Marcha del Silencio" rinde tributo global al fiscal Nisman a un mes de su muerte
